Quién es el excéntrico artista que interpreta a Charly García en la serie de Fito Páez
Este miércoles Netflix lanzó la esperada biopic El amor después del amor, sobre la vida y obra de Fito Páez. La serie, protagonizada por Ivan Hochman, recorre los momentos trascendentes en la biografía del cantante rosarino y, por supuesto, en ella no pueden faltar otros artistas que formaron parte de su vida, tanto en el aspecto musical como en el personal.
En este marco, otra de las estrellas del rock nacional que aparecen representadas en la ambiciosa producción de Netflix es Charly García. El ícono del bigote bicolor está interpretado en El amor después del amor por el músico, cantante y compositor Andy Chango, que alcanza una composición sumamente lograda.
En la escena que adelanta el trailer oficial de la serie, el Charly de Andy Chango aparece recostado en un sillón de su departamento y fuma mientras mira que en la televisión está tocando Fito Páez. “El flaquito narigón del teclado”, dice Charly con la vista fija en la pantalla de la tele, para luego añadir: “Me está copiando”.
Así se presenta en la serie el cantante de “Yendo de la cama al livng”, que luego tendrá un rol central en el desarrollo de la carrera del rosarino, junto con otro personaje vital de la serie -y de la vida sentimental de Fito- que es Fabiana Cantilo, interpretada en la biopic por Micaela Riera.
Andy Chango recrea con exactitud las poses, los gestos y hasta la voz de García en cada una de las escenas en las que le toca aparecer. Y eso a pesar de que esta es apenas la segunda vez que el cantante y compositor nacido en Buenos Aires hace 52 años trabaja como actor. La primera vez fue en un pequeño papel en Según Roxy, la comedia creada y protagonizada por Julieta Otero, que comenzó en las redes, y llegó luego a Netflix.
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“Cuando me puse el bigote, ya fue”
“Creo que acepté hacer de Charly porque era algo imposible. Las cosas normales no te las hago, no me salen. Pero éste era un desafío imposible, porque es una persona viva, con una personalidad extrafuerte y que todavía hoy nos parte la cabeza a todos”, contó el propio Chango a la revista Rolling Stone sobre su participación en El amor después del amor.
Allí, el compositor también dijo que lo llamó el mismísimo Fito Páez para que él hiciera este papel. “Es una de las personas a las que no les puedo decir que no a nada”, señaló.
A continuación, el músico contó cómo había sido el proceso de interpretar a García: “Primero estaba muerto de miedo, pero me fui haciendo la idea y cuando me puse el bigote, ya fue… Ahí me convertí en Charly. Dejé de sentirme un suicida y un vendedor de humo cuando me pusieron el bigote. Ahí me miré al espejo y sentí que era Charly”.
Además de su extensa trayectoria en el universo de la música, oficio por el que vive mitad del tiempo en la Argentina y la mitad en España, Chango se considera un hombre de mundo y un bon vivant. En la década de 2010, además, este artista múltiple alcanzó gran popularidad por su aparición como columnista o invitado en distintos programas de televisión, como Duro de domar o el recordado ciclo Memoria, de Chiche Gelblung.
Provocador, locuaz y con un humor corrosivo, en esos tiempos Andy Chango llamaba la atención también por su prédica en favor de la cultura cannábica, lo que lo llevó a entrar en distintas controversias mediáticas. El año pasado, Chango también tuvo una incursión en los medios de comunicación, con un programa de radio, Clínica Chango, y algunas participaciones en emisiones en Futurock.
En El amor después de el amor, Chango vivió la paradoja de encontrarse en la ficción con personajes, famosos y no tanto, con los que él había interactuado en la vida real, por compartir el ambiente artístico.
Con respecto a cuál fue la sensación que vivió al “reencontrarse” con aquellos conocidos de antaño, el compositor expresó: “Fue una locura, yo me tomaba tres copitas, me ponía el bigote y, para empezar, ya me creía Charly. Y después tenía a mi lado al falso (Andrés) Calamaro, al falso Fito, al falso Fernando Moya (manager de Fito), el falso Ale Avalis (amigo de la juventud de Fito). Todo un disparate, una locura. Era Volver al futuro cuatro”.
“Un despelote para mi psiquis y encima yo la adornaba con un par de detalles, un poco de alegría, y la confusión era real”, concluyó el músico que se puso en la piel de Charly García.