Habría un “ADN educativo” que interviene en el enamoramiento

Texto: Carmen Murtagh

Muchos son los factores responsables de que nos enamoremos. Pero ante características parecidas de dos candidatos, ¿por qué elegimos a uno y no al otro? Habría un gen responsable de esta selección. Un estudio encontró que es más probable que haya conexiones cuando se comparte un nivel educativo similar. Mira.

El amor tiene cara de… ¿estudioso?. - Foto: skynesher / Getty Images
El amor tiene cara de… ¿estudioso?. – Foto: skynesher / Getty Images

Emparejamiento selectivo

¿Sabías que tus genes podrían impulsarte a una relación con alguien que tenga un nivel educativo similar al tuyo? Así lo sugiere un nuevo estudio de investigadores británicos publicado por la revista Intelligence en 2016. La investigación incluyó a unas 1,600 personas del Reino Unido, que estaban casadas, o bien, convivían. La misma halló que aquellas con genes que las predispusieran a alcanzar un logro educativo alto, tendían a unirse y a tener hijos con personas con un ADN similar.

Los investigadores ya sabían que las personas por lo general eligen compañeros con rasgos similares, un fenómeno conocido como “emparejamiento selectivo”. Pero, según los investigadores, este es uno de los primeros estudios en sugerir que los genes tienen un rol en seleccionar a una pareja con unos niveles educativos similares, explica el sitio MedlinePlus.

“Nuestros hallazgos muestran evidencias firmes de la presencia de un emparejamiento selectivo genético en cuanto a la educación en el Reino Unido”, comentó el coautor del estudio, David Hugh-Jones, y profesor principal en la Facultad de Economía de la Universidad de Anglia del Este.

Personalidades compatibles

“Hay cuatro tipos de sistemas cerebrales, según la sustancia que más se segrega, y que estarían ligados a personalidades distintas y tendrían un papel en el enamoramiento, explicó al medio español La Vanguardia Helen Fisher, profesora de Antropología de la Universidad Rutgers de Nueva York, más conocida como “la antropóloga del amor” por los años que lleva dedicada a su estudio.

“Hemos observado que las personas que tienen una personalidad curiosa o una convencional tienden a enamorarse de alguien que sea como ellas; en cambio, quien tiene una personalidad donde domina la testosterona tiende a sentirse atraído por quienes expresan mayores niveles de estrógenos y viceversa.”

Habría, agrega, una determinación biológica para enamorarse de una u otra persona, además de los factores que se habían considerado hasta ahora: aspectos psicológicos, la atracción visual, compartir valores y cultura, o tener un nivel de inteligencia y socioeconómico similar.

Y tú: ¿qué tienes en común con tu otra mitad? ¿Qué fue lo que encendió la chispa del romanticismo entre ustedes?

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