Johnny Depp y Amber Heard: expertos advierten que no existe el "abuso mutuo"
El juicio de Johnny Depp contra Amber Heard por difamación ha resultado más que una contienda de una pareja famosa; es una batalla televisiva que ha concentrado el interés del público en todo el mundo.
Fanáticos y expertos en redes sociales y medios se han dividido para tomar posición junto a cada una de las dos partes que ya están decididas a dejarlo todo -dignidad incluida- en la sala del juzgado Fairfax, Virginia.
Se anunció que este juicio duraría aproximadamente seis semanas de las cuales han transcurrido la mitad, y tras una pausa de una semana, se reanuda para finalmente arrojar un veredicto, aunque los expertos advierten que no habrá un verdadero ganador.
Ha corrido mucha agua, por no decir sangre, debajo del puente que estas dos celebridades están transitando, de manera que entre tantos detalles, se hace difícil seguir la pista de todo lo que ha pasado durante las últimas semanas en el juicio en el que Depp y Heard se han acusado mutuamente de agresores.
De hecho, entre las primeras personas en testificar estuvo la psicólogo y terapeuta de la pareja Laurel Anderson, quien describió la relación como de “abuso mutuo”. Hoy, esta frase ha recibido la atención de expertos que coinciden en que no existe semejante comportamiento, sino que siempre hay un agresor principal, que es quien toma control de la otra persona en la pareja.
Ruth Glenn, presidenta y directora ejecutiva de la Coalición Nacional contra la Violencia Doméstica dijo a NBC que aunque dos personas en una pareja pueden ser tóxicas entre sí, la dinámica del abuso suele tener un agresor principal, y sus agresiones -físicas o mentales- son las que generan que la otra persona se defienda respondiendo incluso físicamente.
Sin embargo, puede ocurrir que estas acciones de defensa propia comiencen a ocurrir sin que haya una amenaza, con lo cual ya no estaríamos hablando de defensa, dijo a Insider la terapeuta Darcy Sterling, quien especifica que la autodefensa se manifiesta en el momento preciso de recibir violencia o bajo la creencia de que la violencia es inminente.
Por su parte, la psicoterapeuta Janie Lacy, especializada en trauma de relaciones dice a NBC que las relaciones muy volátiles sí pueden describirse como abuso mutuo y que frecuentemente es consecuencia de traumas. Y si de traumas hablamos, ambas celebridades han alegado haber vivido situaciones asadas tormentosas, que los persiguen aún hoy. La verdad es que, no importa la fortuna ni la fama ni mucho menos lo idílica parezca la vida en Hollywood, nada garantiza la felicidad y la estabilidad.
Traumas del pasado
Janie Lacy explica también que en las relaciones intensas a veces pueden manifestarse vínculos traumáticos, los cuales no son únicos y exclusivos de las relaciones románticas, sino que pueden desarrollarse con padres abusivos, lo cual puede hacer que se desarrolle reactividad al trauma en las relaciones como adulto. De esta manera, cuando dos personas en una relación experimentan esta reactividad pueden desarrollar patrones destructivos en la pareja.
En este sentido, esto podría explicar la situación que envuelve a estas celebridades, pero nada justifica el comportamiento abusivo. Ruth Glenn alerta que ni los traumas del pasado, ni el abuso de sustancias, son excusas para absolver a nadie de ser abusador, porque esta es una posición en la que se elige estar activamente, por necesidad de control y poder.
La psicólogo clínico Adriana Gioni observa que, específicamente en el caso de Depp-Heard, con lo que se ha visto a lo largo del juicio, no hablaría solo de una relación tóxica, en la cual hay falta de respeto y abundancia de conflictos, sino que puede presumirse que en ambos hay indicadores clínicos de trastornos, entre ellos, el trastorno límite de la personalidad.
Este trastorno fue mencionado en el estrado por la psicólogo clínico Shannon Curry, como parte del diagnóstico que hizo a Amber Heard tras entrevistarla durante 12 horas y revisar su historia de salud mental.
Reconocer la amenaza desde el principio
Aunque hay distintas formas de abuso, emocional, verbal, sexual e incluso financiero; hay señales para reconocer de forma más temprana que una relación puede tornarse abusiva.
Adriana Gioni dice que pueden haber luchas de poder, y notarse que un miembro de la pareja quiere tener control sobre el otro, hay pobre vinculación afectiva con un patrón de ver al otro como un objeto y hay comportamientos pasivo agresivos como el uso de sarcasmos, comentarios hirientes, actitudes desafiantes y una mala gestión emocional.
Un ejemplo de esta mala gestión emocional son los berrinches, que pueden manifestarse con silencios extremos, o explosiones. La psicóloga Maria Fatima Seppi Vinuales, explica que no se trata de no sentir, sino de canalizar con respeto y asertividad lo que sentimos.
En un episodio de explosión, “la persona parece salirse de control. Incluso se acompaña de cambios a nivel físico, como enrojecimiento del rostro. Quien observa la situación ve dramatismo y exageración, ya que el berrinche escala rápido. En los peores casos, la rabieta deriva en insultos, en violencia física hacia la otra persona o hacia objetos”, dice Seppi en su artículo publicado en Mejor con Salud.
Evitar llegar al extremo
A lo largo del juicio entre Johnny Depp y Amber Heard se han presentado evidencias tanto en video, como en audio, que han dejado sobre la mesa, entre otras cosas, esta pésima gestión de las emociones que fue creciendo y desarrollándose hasta generar situaciones que llevaron a extremos sumamente peligrosos esta relación.
Podemos estar ante síntomas de trastornos psiquiátricos, ante la explosión de sentimientos que han sido reprimidos a lo largo de mucho tiempo, y ante una mínima tolerancia a la frustración, todo esto pudo tener solución. Seppi aconseja que ante las primeras señales que arrojan estas actitudes, lo mejor es buscar ayuda profesional, identificar los detonantes y encontrar espacios que nos permitan liberar nuestra mente de estrés para evitar en lo posible la reactividad.