Jorge Lanata y Elba Marcovecchio, la historia de un amor que hoy atraviesa una dura prueba
En 2021, el mundo del espectáculo se sorprendía al enterarse de que Jorge Lanata iba a casarse con su pareja, la abogada Elba Marcovecchio, luego de casi un año de noviazgo. Pero, ¿cómo nació esta historia? La pareja se conoció en el ámbito judicial , cuando el periodista se enfrentaba a Flor de la V en una mediación por temas de derecho de imagen y ella, siendo parte del equipo de Fernando Burlando, defendía a la actriz. “Fue todo natural. Me sentí cómoda desde el primer momento”, remarcó la letrada en una entrevista que le brindó a un programa de televisión.
Y luego en diálogo con otro ciclo de TV, Marcovecchio expresó: “Fue rarísimo porque desde el primer día yo cancelé todo. ¿Viste que hay gente que te manda un chat? En la primera cena con Jorge cancelé todo. A una persona le dije: ‘Creo que estoy de novia’. Imaginate cómo me habré sentido”.
La abogada es oriunda de La Plata, estudió derecho y al momento de conocer a Lanata era viuda y madre de dos niños: Valentino y Allegra. “Me gustó todo de él. Una persona te gusta con todo lo que trae o no te gusta”, afirmó ella sin querer dar muchos detalles. “Yo soy muy femenina y él es muy caballero . Estoy absolutamente feliz” , aseguró entonces.
Por su parte, el periodista también estaba embelesado con su nueva mujer. “ A esta edad uno no tiene novia. Sí, estoy saliendo con alguien, y es todo lo que voy a decir ”, confirmó al aire en su programa Lanata sin filtro. “ Uno se enamora de golpe , no es que uno lo busca”, dijo el periodista un tiempo antes de confirmar el romance en una charla mano a mano con Mirtha Legrand, en donde debatían sobre el amor. “¿Creés en el amor a primera vista?”, inquirió La Chiqui. “Claro, me he enamorado”, respondió él. “Una mina te tiene que gustar. Tiene que gustarte lo que ves, pero aparte tiene que ser inteligente y tiene que ser independiente. Eso me parece importante. No me banco a una mina que no haga nada”, aseguró.
Tiempo después, con la pareja confirmada, Lanata volvió a sentarse en la mesa de Mirtha para confesar lo feliz que estaba. “Estoy enamoradísimo ”, remarcó. “Cuando nos vimos por segunda vez nos quedamos hablando como dos horas, tenía gente esperando y los clavé”, recordó. “Seguimos, seguimos, seguimos y acá estamos”, sumó con un tono más descontracturado.
Con sus sentimientos aclarados, la pareja se dispuso a ensamblar las familias : uniendo a los hijos de ella con las dos hijas de él, Bárbara y Lola. “Con mis hijos se lleva bárbaro, ellos me critican a mí porque bailo y canto, para mis hijos es un papelón y Jorge les da la razón a ellos, es compinche de ellos”, contó la abogada sobre la relación de sus niños con el periodista.
Para conservar la intimidad de ambas familias, decidieron vivir en el mismo edificio, pero en departamentos separados. De esta manera, podían compartir todos los momentos que quisieran, pero también mantener cierta individualidad. “Yo vivo con mis niños, pero estamos todos los días juntos. Es genial. Desde el primer momento supe que esto iba a funcionar”, dijo la abogada.
En abril de 2022, después de casi dos años de romance, la pareja decidió pasar por el altar. La boda se celebró en Exaltación de la Cruz. Con más de 150 invitados, entre los que se encontraban varios famosos, entre ellos Rodolfo Barili, Eduardo Feinmann, Luciana Geuna, Diego Leuco, Luis Majul, Romina Maguel, Marina Calabró y Gabriel Levinas. Para el gran día, ella lució un sencillo, pero precioso vestido blanco perlado sin mangas y la espalda descubierta con detalles bordados en tul, diseñado por Gino Bogani mientras que él también llevó un saco blanco, que combinó con una camisa del mismo color. Por lo demás, el pantalón, los zapatos, el chaleco, el elegante moño y el pañuelo que completaban su vestuario eran de color negro.
Desde entonces, Lanata y Marcovecchio se mostraron como una pareja muy feliz, disfrutando de su romance, solamente opacado por los problemas de salud del periodista, que hizo que en más de una ocasión tuvieran que internarlo. Pero este panorama de paz y amor pareció cambiar radicalmente con la última internación de Lanata, que deja al descubierto que al ensamblar las familias no todo estaba tan armonía.
El duro enfrentamiento entre las hijas de Lanata y Marcovecchio
En las últimas horas, Marcovecchio quedó en el medio de un conflicto luego de que las hijas de Lanata la acusaran de ingresar al departamento del periodista para robarle algunos bienes, además de utilizar sus tarjetas de crédito para realizar grandes gastos. Esta denuncia judicial se da en un contexto de extrema preocupación por la salud del periodista, quien se encuentra internado desde junio, tras sufrir una descompensación de la cual aún no se ha podido recuperar.
Según la denuncia, Marcovecchio realizó múltiples visitas al departamento de Lanata en la calle Esmeralda, el mismo edificio en que ella también reside, donde habría sustraído tanto “dinero en efectivo” como “objetos de gran valor económico y emocional”. Las hijas de Lanata acusan a la mujer de su padre de actuar “aprovechando la vulnerabilidad” del periodista, quien, debido a su estado de salud, no puede intervenir ni estar al tanto de dichas acciones.
Bárbara y Lola aseguran que entre los elementos sustraídos se encuentran: relojes de alta gama, obras de arte y sus respectivos certificados de autenticidad, joyas y otros documentos importantes. Uno de los hechos más graves mencionados en el escrito presentado ante la Justicia, según detallan las descendientes del periodista se produjo mientras Lanata estaba intubado y sedado.
La denuncia presentada incluye como pruebas las grabaciones de las cámaras de seguridad del departamento de Lanata, que mostrarían a Marcovecchio retirando los objetos antes mencionados, así como también los testimonios de empleados de confianza del periodista.
Por ahora Marcovecchio no respondió públicamente las acusaciones, pero sí salió su abogada, Guadalupe Guerrero, a defenderla y asegurar que ella “está destruida” con toda esta situación: “Primero, está muy preocupada por la salud de su marido, Jorge Lanata, y después está muy preocupada por sus hijos, porque es muy agraviante todo lo que están diciendo y ella tiene dos hijos muy chiquitos. Y, por otro lado, está muy preocupada porque las manifestaciones que se están diciendo de ella no son ciertas. Entonces, para ella es un doble dolor, porque ella debería estar dedicada a acompañar a Jorge, y en este momento tiene que estar preocupada por una contienda judicial que resulta ser innecesaria“.
Mientras este enfrentamiento judicial recién arranca, sigue la preocupación por la salud del periodista, que parece estar atravesando una de las más duras pruebas de su vida.