La parte del cuerpo que siempre olvidamos proteger y puede sufrir mucho por el daño solar
Sí. Leemos en todas partes alertas sobre el daño solar. Los anaqueles de los establecimientos comerciales exhiben una amplia gama de productos, con distinto factor de protección, con propiedades hidratantes, con fragancia o sin ella. Agobia la frecuente instrucción y la gran cantidad de opciones, pero es necesario insistir para estimular la protección que a la larga contribuye a nuestra salud.
Sin embargo, a pesar de la abundante información disponible y muy difundida, hay una zona del rostro que, incluso quienes tienen el hábito de protegerse, siempre se descuida: el contorno de ojos.
“He visto a personas perder toda la piel del párpado inferior y superior por el cáncer de piel”, ha declarado el dermatólogo Karan Lal, del Grupo de Dermatología Schweiger al HuffPost, y menciona que las cirugías en esa zona del rostro suelen ser difíciles e incluso pueden tener consecuencias como cicatrices que generen sequedad ocular crónica.
Parece ser que las advertencias que sí hemos logrado grabar en nuestra mente son las de no aplicar productos en el contorno de ojos que no están diseñados para esa zona, y es por esto que esa parte se protege poco o, con suerte, se cuida con lentes de sol. Y es natural, la piel que rodea nuestros ojos es en extremo delicada, con lo cual puede irritarse fácilmente.
La oftalmóloga Luz María Vásquez, especialista en estética y rejuvenecimiento oculofacial, asegura, para el Instituto de Microcirugía Ocular, que la piel de los párpados tiene apenas 0,04 milímetros de grosor, con lo cual es imperioso protegerla del sol con productos que, si son de buena calidad, no tienen por qué representar ningún riesgo, ni afectar la zona ocular.
Incluso destaca que, además de quemaduras en la piel, el impacto de la radiación solar en la zona puede ocasionar incluso lesiones en la cornea, la conjuntiva y en capas más internas como la retina.
En todo caso, además de unos lentes de sol que garanticen la protección contra radiación UVA y UBV, hay que motivarse a usar protección en la zona ocular no solo por la amenaza de la aparición del cáncer de piel, sino también para prevenir el envejecimiento prematuro y la aparición de manchas.
El doctor Lal dice que además de la prevención en este sentido, el uso de protector solar previene también la aparición de ojeras, pues estas a veces surgen por la pérdida de volumen en la piel, así como también a un oscurecimiento o hiperpigmentación en esa zona.
Cómo prevenir el daño en el contorno de los ojos
La primera alerta es la cantidad correcta de protector solar que debemos usar. Algunos aplicamos una fina capa de crema para no sentirnos pegajosos y no pasar demasiado rato esperando que se seque. Otros se ahorran este paso usando maquillaje que ya incluye protección solar. Las dos opciones están erradas.
La doctora Bertha Baum, médico dermatólogo, vocera de Neutrogena, alerta sobre la cantidad correcta de protector solar, pues lo más común es que usemos mucho menos de lo que realmente necesitamos. Este, de hecho, es uno de los errores más comunes que cometemos con relación al uso del protector solar.
“Una rutina de mañana tiene que incluir forzosamente el protector solar pero las grandes preguntas suelen ser cuándo y cuánto aplicar. Lo ideal es lavar o limpiar el rostro, sea con agua micelar, o un jabón suave; luego, si no hay un tratamiento medicado, se pueden usar antioxidantes como vitamina C, y luego es que aplicamos el bloqueador solar, en la cantidad correcta: lo equivalente a una cucharadita, o a tres lineas de protector en tres dedos de la mano, para todo el rostro y cuello”.
Un consejo interesante que ofrece Baum es mezclar el protector solar con la base de maquillaje que usamos para el día. “Es posible que la base se aclare un poquito pero no es un tono demasiado diferente. Es conveniente estar seguros de que el bloqueador no nos irrita, con lo que es una buena idea consultar al dermatólogo cuál podríamos usar”.
Con respecto a las bases que ya traen bloqueador incluido, la doctora Baum también recomienda usar protector antes de la base, puesto que la cantidad de maquillaje que usamos no es suficiente para cubrir las necesidades de la piel. “Además, el FPS de las bases es 15 o 20 y esto tampoco es suficiente para ofrecer una buena protección que debería ser de por lo menos factor 30 o 40, de manera que el maquillaje con protector es un plus que damos a la protección adecuada que nos proporciona el bloqueador ”.
Los protectores solares con color son una alternativa para quienes no quieren usar demasiados productos y actúan como hidratante, protector solar y base al mismo tiempo. Lo importante es que tengamos cuidado de que estén formulados con un factor de protección suficiente.
Por otra parte, otra recomendación valiosa es usar específicamente para la zona del contorno de ojos y los párpados el protector en barra, cuidando que el producto no entre en contacto con la mucosa. Si bien la versión en crema es ideal para rostro, sobre todo cuando somos de piel seca, esta alternativa en barra hace mucho más minuciosa la aplicación en la zona crítica. Así lo explica la doctora Pamela Sanabria en un artículo para la Universidad de Costa Rica. Para el cuero cabelludo, que también es una zona que solemos descuidar, la experta recomienda las versiones en gel.
Finalmente, la doctora Baum concluye que la mejor alternativa para protegernos del sol es usar productos minerales en lugar de químicos, que pueden ser más agresivos sobre todo para quienes tienen piel sensible. Además, es recomendable consultar al médico para saber qué tipo de producto se adecúa a nuestras necesidades específicas, así como saber la recomendación del producto ideal diseñado para esta zona tan frágil.