La poción mágica de ‘Hechizo de amor’ que selló la escena más memorable entre Nicole Kidman y Sandra Bullock

El clásico de culto que protagonizaron juntas en 1998 tendrá secuela

Nicole Kidman y Sandra Bullock estarían negociando su regreso para la secuela de 'Hechizo de amor'. (Foto de Warner Bros.)
Nicole Kidman y Sandra Bullock estarían negociando su regreso para la secuela de 'Hechizo de amor'. (Foto de Warner Bros.)

Es la gran noticia del mundo del cine. Sandra Bullock y Nicole Kidman están negociando el regreso de las hermanas Owens en la secuela de Hechizo de amor (1998), la entrañable comedia dramática sobre una familia de brujas que rodaron cuando estaban ascendiendo en Hollywood a pasos agigantados.

Sin dudas, estamos ante uno de esos casos curiosos donde la industria rebusca en la nostalgia para conseguir un nuevo éxito. Porque, como recordarán los cinéfilos que vivimos aquella etapa de cine, la producción basada en la novela de Alice Hoffman fue destrozada por la crítica hace 26 años (todavía mantiene un desaprobado del 24% en Rotten Tomatoes) y generó pérdidas para el estudio al recaudar menos de lo que había costado ($68.3 millones en todo el mundo contra $75 millones de presupuesto). Sin embargo, no podemos negar que dejó huella en el corazón de la audiencia. La química evidente entre sus protagonistas, el poder del Home Video a finales de los ’90 y una escena en particular ayudaron a calar hondo entre el público, haciendo que la noticia sea recibida con los brazos abiertos.

Solo hay que ver el perfil de Instagram de Warner Bros. donde anunciaron la noticia para descubrir cientos de reacciones positivas. “Si esto es una broma, nunca te perdonaré WB”, reza un comentario. “Me desmayo”, “Llorando, vuelve Sandra”, “Estoy enloqueciendo, es una de mis películas favoritas”, proclaman otros prácticamente al unísono. Hasta Evan Rachel Wood y Alexandra Artrip, las actrices que dieron vida a las sobrinas de Nicole Kidman y Sandra Bullock, se sumaron a la celebración. Ambas reaccionaron con alegría pero demostrando que no tenían idea del desarrollo de la secuela, dejando claro que esperan que Warner las convoque de nuevo.

No obstante, lo que más se repite entre los comentarios es la celebración con margaritas a medianoche, una referencia que responde a la huella que dejó la escena más memorable de la película. Y de la que Nicole Kidman fue responsable.

Dirigida por Griffin Dune (Un hombre lobo americano en Londres), Hechizo de amor contaba con Kidman y Bullock como dos hermanas huérfanas y descendientes de una larga línea de brujas. Criadas por sus excéntricas tías en una ciudad prejuiciosa de Massachusetts, deben lidiar con una maldición que les impide encontrar el amor. Sin embargo, las cosas se complican cuando las hermanas terminan envueltas en un encubrimiento sobrenatural después de que Bullock (sin querer) droga y mata al exnovio abusivo de Kidman (Goran Višnjić), obligándolas a reanimar su cadáver.

No obstante, a pesar de las inconsistencias de la trama, hubo una escena que resulta inolvidable: cuando las hermanas se despiertan a medianoche y comienzan a bailar con la tía Frances (Stockard Channing) y la tía Jet (Dianne West), con margaritas en mano al son de ‘Coconut’ de Harry Nilsson.

Se trata de una secuencia que transmite la camaradería femenina que existía en el rodaje. Mujeres divirtiéndose, siendo libres sin que nadie las mire, bailando en la cocina. Sin embargo, a diferencia de otros actores que fingen beber alcohol en sus escenas, en este caso se dejaron llevar con una botella de tequila, haciendo que esa diversión fuera más real de lo que parece.

Así lo reveló el director en una entrevista con Yahoo! Entertainment, contando que el reparto se divirtió tanto como lo hacen los personajes, bebiendo la botella de tequila con el equipo técnico mientras seguían bailando con la misma canción, incluso con las cámaras apagadas.

“Uno de los días más divertidos que tuvimos fue la última toma en Friday Harbor (Washington, donde construyeron la casa que aparece en la película), luego nos trasladamos al estudio de sonido en Los Ángeles, donde filmamos a todas las chicas bebiendo tequila y se volvieron locas en la cocina”, dijo.

“Bueno, ¿adivinen qué bebimos? Todos bebimos tequila y filmamos esa escena, gracias a Dios el director de fotografía no tomó nada, pero la filmamos y todos se volvieron locos y todos bailamos”, dijo. "Creo que 'Coconut' sonaba. Terminamos la escena pero seguimos bebiendo y bailando”, agregó.

No obstante, ¿quién llevó una botella de tequila al set? Nada menos que Nicole Kidman. Así lo contó Sandra Bullock en los extras del DVD (vía Imdb), revelando que su compañera fue la responsable de proveer el alcohol aquella noche, llevando una botella de “tequila malo”. Incluso lo confirmó en otras ocasiones. Por ejemplo, en una entrevista con el programa Today durante la promoción de la película, diciendo: “No estábamos borrachas cuando filmamos la escena o los primeros planos pero cuando tuvimos que filmar de nuevo una escena desde lejos, de espaldas y con abrigos enormes con la botella sobre la mesa”, alquien le dijo: “No hay ningún motivo para no estar borrachas ahora mismo", y ella accedió.

A su vez, durante un encuentro casual que vivieron en la alfombra roja de los Oscar de 2018, Nicole y Sandra volvieron a recordar aquella noche de tequila y diversión. “Estamos hablando de cuando rodamos juntas y te pedimos que trajeras el tequila. Llegó con su propia botella y la bebimos”, decía Bullock recordando el momento.

“Me encanta esa película”, comentaba Kidman. “Se la mostré a mis hijos […] Éramos buenas hermanas”, aseguraba, pero entonces Sandra añadía: “y buenas bebedoras también”.

Por último, Stockard Channing también recordó aquel momento en otra entrevista para Vulture, asegurando que nadie tuvo problema en aprovechar el tequila que había disponible y como las escenas de fiesta suelen ser desafiantes, la bebida las terminó ayudando.

“No sé cómo estábamos de borrachas, pero decidimos animarnos con una bebida”, dijo. “Creo que una de las cosas más difíciles de hacer es crear una escena de fiesta divertida y estridente. En la toma 28, es muy difícil seguir. Y creo que funcionó”.

Así que ya lo saben. La escena más memorable de este clásico de culto surtió efecto gracias a la diversión real que vivieron sus actrices. Que aquello no era una mera actuación superficial sino que realmente estaban de fiesta con tequila en mano. Y gracias a Nicole Kidman.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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