Los grandes errores que se cometen al elegir un vestido de novia, según un estilista

Es común arrepentirse de comprar un vestido de novia a última hora. (Getty Creative)
Es común arrepentirse de comprar un vestido de novia a última hora. (Getty Creative)

Parece increíble o imposible, pero para una mujer a punto de casarse y celebrarlo, el vestido puede convertirse en el problema más grande e importante de su vida. Menos mal que esos momentos suelen durar poco. Lo sé de primera mano. Mi cuñada eligió un vestido "como lo había soñado". Era corte sirena, con un hermoso escote en corazón que esperaba hacer más discreto con un velo brocado, una cola finamente bordada… Un día antes de la boda, un día antes, decidió que no le gustaba.

Lloró todo el día y lo trató de cambiar, pero no encontró que le hiciera "click". Decidieron hacerle unos arreglos al que tenía a ver si mejoraba, le pusieron una especie de chaquetica corta ajustada con costura, entre otros detalles… El día de la boda sintió que se moriría, peleó con toda su familia y hasta con el novio, no le gustaba la nueva versión del vestido. En moto tuvo que ir al lugar donde lo compró para quitarle todos los arreglos del día anterior y se quedó con la versión original. Se casó, pasó la tempestad, se fue de luna de miel y todo quedó como una anécdota familiar. Se hubiese ahorrado tanto tiempo y dinero si hubiese sabido las recomendaciones de los expertos.

Para la estilista y experta en imagen Hayley Segar, esta no es una historia extraña. Fue testigo de historias similares innumerables veces durante los siete años que trabajó en un salón de novias.

Dada su vasta experiencia, Segar ha logrado recopilar los grandes errores que cometen las novias al elegir sus vestidos para compartirlos en una columna que escribió para Insider. Conocer sus consejos hará que novias y familiares trabajen en conjunto para evitar correderas, lloraderas y demás dramas cerca del día de la ceremonia.

(Getty Creative)
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Mucha gente puede diluir tu opinión

Los programas de televisión dedicados al tema nos ha mostrado salones y espacios nupciales llenos de amigas, tías, madres, y otras allegadas participando en la elección del vestido. Según Segar, mucha compañía no es buena idea.

“Aunque algunas novias se estimulan con la energía de su grupo, a otras les puede resultar difícil destacar sus pensamientos y opiniones del resto”. Esto puede concluir en que la novia termine eligiendo un vestido que no sería su primera elección.

Por otra parte, el conjunto de opiniones de seres queridos puede añadir presión al asunto. El novio opina que el vestido ideal debe ser largo y ajustado; la suegra dice que debe tener mangas; la madre ofrece el que ella uso hace 30 años y estaría honrada de que sea usado. ¡Es demasiada presión! No debemos tener miedo de elegir lo que nos va a hacer felices a nosotras mismas.

Seguir mirando aunque ya compraste el tuyo

Y cómo no hacerlo con tanta variedad disponible en redes sociales, en web especializadas, en referencias, en otras tiendas… El tema de la moda nupcial es fascinante y en un momento de la vida en que estamos pensando mucho tiempo en ello es natural sentir que puede haber algo mejor que cualquier lugar.

Para la experta esto no es conveniente. La solución es honrar nuestra elección y confiar en que, si bien hay muchas opciones en el mercado, tu vestido de novia es único.

Fijarte en detalles poco frecuentes

La moda nupcial puede contemplar diseños que no son frecuentes en nuestro guardarropa. De seguro son pocos -o ninguno- los vestidos que tienen cola, o bordados de pedrería, o un corpiño ajustado… Es posible que nos enfoquemos demasiado en esos detalles que no nos resultan familiares, y es posible que en algún momento eso nos haga sentir inseguras.

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La solución que propone Hayley es ir a la tienda y tratar de probárselo de nuevo al cabo de unos días. Así estaremos más seguras de la sensación que nos brindan estos detalles. Si la incomodidad continúa es bien momento para comentarlo al asesor y revisar otras opciones.

Afortunadamente la moda nupcial es, hoy en día, mucho más desafiante. Deja de un lado los parámetros clásicos para abordar de frente la autenticidad, el valor de mostrar nuestra personalidad a través del atuendo.

La angustia del presupuesto

Es posible que el vestido de novia sea la compra de ropa más costosa que hagamos en la vida, y que después de quedar maravilladas nos sintamos angustiadas por el exceso. Segar dice que el arrepentimiento es muy común. Lo mejor es tener desde el principio un plan organizado de gastos en el cual todo puede modificarse en función de lo que nos haga más felices.

Todo el proceso de encontrarnos con esa elección ideal no tiene que ser una angustia, hay que ser leal a lo que somos, a nuestros gustos y rendirnos al hecho de que esa selección puede ser un momento único y especial en nuestras vidas. Confiar en nuestros propios criterios, y honrar nuestros instintos puede ser determinante en minimizar los errores y las dudas.

Tendencias actuales

Hayley Segar no lo menciona, pero conocer las tendencias actuales puede ser de mucha utilidad a la hora de elegir el atuendo adecuado. No todas las personas tienen tan claro cuál es su estilo, ni han visto en sueños su vestido ideal, de manera que tener referencias sobre lo que está marcando pauta en el mercado puede servir de guía e inspiración.

El portal especializado Bodas en México recopila las características que a lo largo de este año serán las más destacadas en cuanto a diseño, textura y color. De esta manera mencionan que los vestidos en texturas ligeras y cortes naturales y frescos, son la principal alternativa, seguida de los diseños muy sobrios y elegantes.

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Para las más románticas, los hombros descubiertos son ideales, así como también los apliques innovadores como los efectos 3D y las plumas. Asimismo, los vestidos en distintos tonos como el off-white y ivory también destacan, mientras que para las más audaces y actuales los atuendos de pantalones y jumpsuits, así como las opciones sustentables son una sensación.

Por otra parte, la revista Brides destaca el cuello barco como una línea de diseño que es tendencia actualmente y que es mucho más actual, sofisticado y versátil que uno en V o en corazón. Es modesto y atemporal y ofrece opciones para distintos estilos.

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