Miel melipona: uno de los secretos mejor guardados de México

México guarda muchas maravillas en su territorio, y una de las más preciadas pero quizá menos conocidas, es la miel melipona, producto de una especie de abeja endémica cuya peculiaridad es que no tiene aguijón.

Es en la península de Yucatán donde se concentran la gran mayoría de las abejas meliponas, responsables de la miel del mismo nombre que, en la antigüedad, fue tan valiosa que habría llegado a considerarse moneda de cambio.

Era tan importante que también se realizaban varias ceremonias al año en su honor, y hoy todavía se realizan algunos rituales para su producción y cuidado.

Estas abejas se alimentan de las flores de la selva, y serían responsables de hasta el 80% de la polinización de las selvas en Yucatán, Campeche y Quintana Roo. A pesar de ello, estarían en riesgo al preferirse otras especies para la producción de miel.

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Y es que, como explica Luis Bringas, especialista en agricultura y desarrollo rural en el portal Más de MX, cada jobón, o colmena, produciría solo un libro de miel cada año, en condiciones favorables.

Algunos de sus beneficios

La miel melipona no solo es especial por todo lo ya mencionado, sino que también tendría beneficios para la salud, que ya los mayas conocían. De hecho, este pueblo le asignó una deidad protectora a estas abejas, llamada Ah Mucen Kab, ya que creían que creían que esta miel servía para restaurar el hun ol, o la armonía del corazón.

Además, se ha llegado a utilizar para:

• Regularizar la función intestinal.

• Soporte para el tratamiento de gastritis y úlceras gástricas.

• Tratar problemas oculares, como conjuntivitis o heridas.

• Combatir enfermedades respiratorias, como sinusitis o laringitis.

• Tratar manchas en el cutis.

• Calmar fiebres.

• Dar apoyo al sistema inmunológico.

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¿Dónde conseguirla?

La miel melipona no solo es poco conocida, sino que como ya se describió anteriormente, también es poco producida. Esto la hace un tesoro algo complicado de encontrar, pero existen cooperativas, como La Casa Catorce, que la producen.Otra opción podría ser Miel Nativa, que además ofrece una degustación y alojamiento con Airbnb.

@travesabarros