Murió Graciela Maglie, una autora de cine y TV sensible a las temáticas femeninas y los problemas sociales más delicados

Murió Graciela Maglie, una autora de cine y TV sensible a las temáticas femeninas y los problemas sociales más delicados
Murió Graciela Maglie, una autora de cine y TV sensible a las temáticas femeninas y los problemas sociales más delicados

Quiso el destino que en la víspera de una nueva entrega de los Martín Fierro se conociera la noticia del fallecimiento, a los 79 años, de Graciela Maglie, una de las más destacadas autoras de cine y televisión de las últimas décadas en la Argentina, cuando falta muy poco para que se cumplan tres décadas del gran triunfo de Nueve lunas en una ceremonia similar a la de este domingo.

Ganadora de todos los premios importantes del Martín Fierro 1993 en las categorías de ficción, Nueve lunas quedará en el recuerdo como síntesis y emblema de la carrera de Maglie como autora. La serie, que giraba alrededor de la vida personal y profesional de una pareja de médicos (un ginecólogo encarnado por Oscar Martínez y una obstetra personificada por Cecilia Roth), hablaba sin complejos de toda clase de temas relacionados a la vida de las parejas y las familias en un amplio rango que iba desde el divorcio y la infidelidad hasta el incesto y las experiencias sexuales traumáticas. Maglie, como en otros momentos de su relevante trayectoria, escribió los guiones junto a Fernando Mateo.

Cecilia Roth y Susu Pecoraro en Laura y Zoe, una de las mejores series de TV guionadas por Maglie
Cecilia Roth y Susu Pecoraro en Laura y Zoe, una de las mejores series de TV guionadas por Maglie

La autora siempre privilegió el lugar de la mujer en sus historias de ficción. Su atención se había dirigido muy temprano hacia esas temáticas, primero en la actividad profesional que desempeñó como investigadora social en el área de la educación para adultos y luego con una progresiva atención a los vínculos entre las problemáticas femeninas y los medios de comunicación.

Maglie estaba investigando el caso de la prensa femenina en la Argentina durante las primeras décadas del siglo XX para su tesis doctoral en Sociología cuando empezó a tomar contacto con el guionista y director Eduardo Mignogna, a quien acompañaría desde allí como estrecha colaboradora de casi todos sus trabajos para el cine y la TV.

Lo primero que le pidió Mignogna fue un testimonio sobre Eva Perón para su película documental Quien quiera oír que oiga. En el último tramo de su carrera, Maglie volvería al mismo personaje, ahora como guionista de Eva de la Argentina, una biografía animada. En aquel primer encuentro, Mignogna le ofreció a la inquieta investigadora social sumarse al proyecto de una serie de TV sobre la discapacidad. Maglie se encargó de la investigación de campo y sus resultados, según reconoció la propia autora en una charla publicada en el libro Historia de la Televisión Argentina contada por sus protagonistas, de Luis Buero, llevaron a Mignogna a decirle: “Yo creo que sos una guionista innata”.

Esa serie, estrenada a comienzos de la década del 80 en Canal 13 con el título de Desafío a la vida, inició un largo vínculo profesional que siguió en el cine con Flop, La fuga y El viento, todas dirigidas por Mignogna, y en la tele, con una muy elogiada serie sobre la vida del escritor Horacio Quiroga, en la que quedaron a la vista las inquietudes de su autora alrededor de la figura del maestro rural. Esas búsquedas se extendieron al ámbito documental, mientras autora y director también trabajaban juntos en un par de series para la televisión española.

La pasión por el cine que Maglie tenía desde chica, con dos años de estudio en el Cine Club Argentino previos a su entrada en la carrera de Sociología de la UBA, reapareció y empezó a profundizarse. Así, a través de compromisos cada vez más amplios y exigentes, de a poco empezó a ganarse un nombre dentro del mundo audiovisual.

Tras escribir el guion de Después de la tormenta, dirigida por Tristán Bauer, Maglie se concentró en un largo trabajo de indagación y búsqueda de datos para la película sobre el crimen todavía no resuelto de María Soledad Morales en Catamarca. De allí surgió una película (El caso María Soledad) que marcó su primer encuentro con Héctor Olivera, del que luego surgirían exitosas producciones como la citada Nueve lunas (que llegó a los 80 episodios en dos temporadas atípicas para una ficción de ese tipo) y Laura y Zoe, dos de las más tempranas experiencias de ficción televisiva en nuestro país realizadas con recursos técnicos y humanos provenientes del cine. El último trabajo destacado que hizo Maglie para la pantalla chica fue el guion de La defensora, serie testimonial sobre una abogada (Virginia Innocenti) que trabaja en Tribunales como defensora de menores e incapaces ocupándose de temas de altísima sensibilidad.

Maglie tuvo también una larga y relevante tarea institucional. Fue vicepresidenta de la asociación La Mujer y el Cine, vocal de la Academia del Cine de nuestro país y presidenta desde 2004 del Consejo Profesional de Televisión de Argentores. Cumplió tareas oficiales como asesora de la Subsecretaría de la Mujer en los primeros años de la recuperación democrática y en 2001 obtuvo el Premio Konex en la categoría de guion de cine y televisión.

Su prolífica presencia como guionista queda a la vista en múltiples aportes al cine, en un rango amplio que va desde la comedia liviana y sin pretensiones (Un argentino en Nueva York) al drama histórico (Felicitas, Familia Lugones) y al compromiso testimonial sobre temas relacionados con la memoria. Esta última inquietud se inició para Maglie dentro del cine en 1993, cuando se sumó a los guionistas de la muy elogiada Un muro de silencio, de Lita Stantic, y perduró hasta el final, junto con sus acciones en favor de la protección de los derechos de los autores y del fomento a la producción cinematográfica argentina.

Graciela Maglie había nacido en Buenos Aires el 19 de enero de 1944.