Neve Campbell pica el anzuelo de ‘Scream’ y refleja la cara que no queremos ver de Hollywood

Parece que 'Scream VII' estará repleta de dosis nostálgicas que contentarán a los fans que decepcionaron con el menosprecio salarial a su actriz original

Neve Campbell volverá a la saga de 'Scream' después del menosprecio salarial que dijo haber sufrido con la secuela anterior. (Foto de Joseph Viles Dimension Films)
Neve Campbell volverá a la saga de 'Scream' después del menosprecio salarial que dijo haber sufrido con la secuela anterior. (Foto de Joseph Viles Dimension Films)

Neve Campbell lo anunció alto y claro en redes sociales. Vuelve a la saga Scream después de la decepción que provocó que abandonara la franquicia a raíz del bajo salario que le ofrecieron para aparecer en la sexta película. Ahora, la actriz original del slasher creado por Wes Creaven asegura sentirse “feliz y orgullosa” de poder compartir con los fans que le pidieron que volviera a interpretar a Sidney Prescott de “la manera más respetuosa”, sugiriendo que habrían solucionado la polémica disputa salarial.

De esta manera, la actriz de 50 años espera que “los fans estén tan entusiasmados” como ella ante la noticia. Sin embargo, ha corrido mucha agua en este río y por mucha alegría que provoque su merecido regreso entre los fieles seguidores de la saga, la revelación no deja de esconder un análisis sobre la frialdad del negocio de Hollywood.

Porque si esta saga pudo mantener al slasher en la cima de la taquilla mundial (un logro que es más bien una excepción en este subgénero del terror) no fue por la calidad de todas sus películas (¿o alguien puede defender la tercera y cuarta?), sino justamente por la fidelidad de esos fans que ahora contentan con el regreso de Neve Campbell. Los mismos fans que decepcionaron hace apenas dos años cuando cerraron la puerta a la continuidad de la actriz con un salario que, según las explicaciones que dio en su momento, no estaba a la altura de la demanda que tiene su personaje.

“Sentí que la oferta que me presentaron no equivalía al valor que le había aportado a la franquicia”, dijo en un comunicado de 2022 (vía The Hollywood Reporter). Más tarde, en una entrevista con People señaló la misoginia de su industria como parte de su disputa. “Sinceramente, no creo que si yo fuera un hombre y hubiera hecho cinco entregas de una gran franquicia durante 25 años, el número que me ofrecieron sería el número que le ofrecerían a un hombre”.

Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette, el trío original de 'Scream'. (Foto de Kevin Winter/Getty Images)
Neve Campbell, Courteney Cox y David Arquette, el trío original de 'Scream'. (Foto de Kevin Winter/Getty Images)

En mi alma, simplemente no podía hacer eso. No podía caminar en el set sintiéndome así, sintiéndome infravalorada y sintiendo la injusticia o la falta de justicia”, añadía mientras en otras entrevistas dejaba la puerta abierta a volver algún día, siempre que le ofrecieran “un monto que sintiera que mantenía el valor que llevaba [a las películas]”.

El momento finalmente llegó pero no puedo evitar preguntarme, ¿ahora sí importa darle el gusto a los fans llegando a un acuerdo tras el menosprecio anterior? ¿O se trata de una solución desesperada porque simplemente necesitan a Neve Campbell más que nunca?

Despidos y una pesadilla: la encrucijada de Scream

No podemos saborear la noticia del regreso de Neve Campbell sin asociarla directamente a los últimos acontecimientos que vivió la saga. Porque Scream VII estaba en marcha con otro director (Christopher Landon) hace apenas unos meses, con la intención de que Melissa Barrera y Jenna Ortega volvieran a interpretar a las medio hermanas protagonistas después de liderar con éxito la quinta y sexta película. Pero entonces los productores despidieron a Melissa por sus comentarios en redes sociales en apoyo a Palestina que interpretaron como antisemitas. El día después, Jenna anunció que no volvería. Oficialmente se dijo que su renuncia se debía a conflictos de agenda por sus compromiso con la segunda temporada de Merlina, pero otras fuentes sugirieron que se debió a su propia disputa salarial.

En ese momento, según publicó Variety, la producción tuvo que remover sus cimientos y pedir a los guionistas que empezaran con la historia “desde cero”. Pero, poco después, Landon también dejaba el timón del barco. “Fue un trabajo soñado que se convirtió en una pesadilla”, dijo el director en X (antes Twitter).

Con todo esto, podemos sospechar que el desarrollo de la séptima película se convirtió en un caos. En una pesadilla marcada por polémicas, despidos y, encima con la protagonista original habiendo aireado al mundo el menosprecio económico vivido.

Ghostface volverá a hacer de las suyas con una séptima película de 'Scream'. (Foto de James Gourley/Getty Images for Paramount Pictures)
Ghostface volverá a hacer de las suyas con una séptima película de 'Scream'. (Foto de James Gourley/Getty Images for Paramount Pictures)

¿Qué hacer entonces? ¿Podían empezar desde cero con una nueva dupla protagonista? Seguramente era una opción. Después de todo, el fichaje de Melissa Barrera y Jenna Ortega funcionó. Scream VI fue un producto aceptable y disfrutable que logró los mejores resultados de taquilla para la saga desde Scream (1996) y Scream II (1997), incluso sin Neve Campbell en la ecuación -la película de 2023 obtuvo $168 millones cuando las dos anteriores hicieron $173 y $172 millones respectivamente hace casi tres décadas-.

Pero, ¿cómo captar de nuevo a los espectadores con otro reboot en dos años? Tampoco hablamos de una saga con el poder de convocatoria de Spider-Man y, además, empezar desde cero supone el riesgo de desgastar aun más una historia muy repetida. ¿O cuántos familiares de Ghostface vamos a ver buscando venganza?

Analizando los caminos de Scream resulta evidente que llamar a Neve Campbell era el billete de ida a las salas de cine con mayor potencial para convocar al público. Básicamente porque estamos hablando de una saga que bebe directamente del poder de la nostalgia.

El poder de los fans cuando conviene

No podemos olvidar que si Scream (2022) funcionó en taquilla y revivió la franquicia fue en gran parte al apetito nostálgico. Mientras Melissa Barrera y Jenna Ortega eran las representantes de la nueva generación de protagonistas que acercaba la historia a nuevos espectadores, el trío original formado por Neve, Courteney Fox y David Arquette era el anzuelo para atraer a los fans de siempre. Pero entonces hicieron la sexta entrega sin Campbell. Tenían a Melissa y Jenna como nuevos imanes de atracción, haciéndonos entender que ya no necesitaban a la actriz protagonista. Que un salario acorde a su posición en la saga no era primordial para la producción por mucho que los fans pidieran su presencia y reaccionaran con enfado a la polémica de su salario.

Pero entonces se dio vuelta la tortilla y ahora la nostalgia es la única salida.

Cuando los fans pusieron el grito en el cielo al conocer que Neve Campbell no estaría en Scream VI, la producción siguió delante de todos modos. Ni siquiera se dio una explicación oficial que calmara las almas nostálgicas. Más allá de asegurar que les encantaría contar con ella y que apoyaban su decisión como "mujer de negocios", como dijeron los directores de la sexta secuela a THR y el guionista a Variety, no se dieron más explicaciones sobre el salario ofrecido.

Sin embargo, con todos los cambios sufridos con el desarrollo de la séptima, ahora sí parece que buscan dar respuesta a las peticiones de los fans con una nueva secuela que responderá a la sed nostálgica por completo. ¿Porque ahora sí les conviene?, me pregunto. Después de todo, esos fans son los que mantienen la saga vigente como fenómeno de taquilla y los que siguen haciendo que Ghostface sea un clásico de Halloween casi treinta años después.

Fíjense si la nostalgia es tan importante en Scream VII que además del regreso de Sidney Prescott, la séptima película ya no cuenta con los guionistas previstos hace unos meses. El guion lo firma nada menos que Kevin Williamson, el guionista original de la película de 1996, escritor de otros clásicos generacionales como Sé lo que hicieron el verano pasado, las primeras secuelas de Scream y creador de Dawson’s Creek. No solo firma el libreto de forma independiente sino que, además, dirigirá la película como el único padre que queda de la saga tras la muerte de Wes Craven en 2015.

Todo esto hace que Scream VII esté rodeada de potencial nostálgico, contentando y convocando a esos fans que decepcionaron en 2022 cuando dieron la espalda a Neve Campbell. Lo que nos lleva a la conclusión de que Hollywood no deja de ser un negocio por mucho que la pasión fanática eleve una producción al éxito económico. Que por mucho que los fans con frecuencia sientan que son el eslabón principal detrás de un fenómeno, contentarlos no siempre es la prioridad absoluta cuando económicamente existen otras vías para hacer dinero en taquilla. Y en este caso resulta fácil cuestionar si complacer a los leales seguidores de la saga de Ghostface surge más bien de la necesidad comercial tras el caos vivido.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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