¿Sabes cada cuánto deberías cambiar de champú?
¿Cuántos champús has probado hasta encontrar uno que te funcione? En ocasiones esto puede ser más difícil de lo que parece, pero quizá sea momento de cambiarlo y no te habías dado cuenta. Te contamos por qué deberías o no cambiar de champú y por qué.
El cabello no se ‘acostumbra’ a un champú
Suele decirse que el cabello se vuelve ‘inmune’ a los champús tras cierto tiempo. Es decir, que la fórmula dejaría de hacer efecto. Sin embargo, se trataría solo de un mito.
La realidad es que, si después de cierto tiempo de usar un champú tu cabello cambia, como secándose, o volviéndose más quebradizo o grasoso, es muy probable que no estés usando el producto ideal para ti. También puede ser que no sea lo que necesitas en un momento en específico, como destacó Shannel Mariano, estilista responsable de portal latest-hairstyles.com a la revista Women’s Health Magazine.
El cabello sí cambia
Ahora bien, sí es verdad que el cabello cambia por diversos factores, en cuyo caso sí sería recomendable elegir un champú adecuado a sus necesidades.
Cambios en el agua, o los niveles hormonales pueden tener efectos en el cabello. Pero también los cambios de estación.
Por ejemplo, en invierno el ambiente es más seco y el aire más frío, esto podría resecar el cabello. Así que, durante los meses, fríos los recomendable sería elegir un champú más hidratante.
En verano, las altas temperaturas y el sol, lo vuelven un poco más grasoso, por lo cual lo mejor sería una fórmula que le otorgue más volumen, como recomienda Doug Bielanski, director de educación de Frederi Fekka, al portal Birchbox. También es importante protegerlo de los rayos del sol, por lo que un champú que haga eso sería ideal.
Bielanski también recoge que la dieta puede afectar al cabello, ya que ingerir grasas saludables (como aguacate) le podría dar más brillo al cabello. A la vez, una dieta baja en grasas podría resecarlo.
Qué tan seguido cambiar de champú
Sobre este tema parece que no hay un consenso general. Hay quien asegura que no hay ningún daño en hacerlo, siempre y cuando tu cabello lo soporte. Pero sobre todo hay que considerar qué podría necesitar tu cabello, aquí algunos ejemplos:
Si te lo tiñes, prefiere una fórmula que repare el daño.
Ante la pérdida de cabello, elige uno que aporte más volumen.
El cabello seco necesitaría un champú hidratante.
Las canas engrosan el cabello, por lo que necesitan una opción que las suavice.
Si lo maltratas mucho, exponiéndolo a la secadora de pelo, la plancha, las tenazas e incluso las extensiones, lo mejor es encontrar una fórmula que lo cuide y restaure.
Pero, como recoge el portal Skin Help, cambiar mucho de champú también podría ser contraproducente, en caso de que no lo necesite. Entre los riesgos que enlistan está la posibilidad de padecer condiciones como dermatitis, dermatitis seborreica y hasta pérdida de cabello. Por eso recomiendan prestar atención al cabello y quedarse con la fórmula que mejor te funcione.
Así que ya lo sabes, si tu champú te funciona, no hace falta que lo cambies, pero si tu cabello cambia lo mejor es buscar una fórmula específica para sus necesidades.
¿Qué tan seguido recomiendas lavar el cabello?
@travesabarros
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