¿Sabías que durante los primeros meses los bebés no saben respirar por la boca?

Puede parecer una bobada; si todos respiramos por la nariz, ¿no? Error. Respirar por la boca ayuda a evitar problemas de salud

Los mocos no les dejan dormir, impiden que se alimente bien al congestionar la nariz, y constituyen la <a href="https://es-us.noticias.yahoo.com/bronquiolitis-la-peor-pesadilla-de-los-padres-122143131.html" data-ylk="slk:principal preocupación de los padres;elm:context_link;itc:0;sec:content-canvas;outcm:mb_qualified_link;_E:mb_qualified_link;ct:story;" class="link  yahoo-link">principal preocupación de los padres</a> cuando la infección alcanza las vías respiratorias bajas. (Foto: Getty)

Los bebés respiran diferente a como lo hacen los adultos, y durante los primeros meses no lo hacen por la boca. Algunos incluso no saben hacerlo hasta los 6 meses de vida. Por ello, y debido al pequeño diámetro de sus fosas nasales, cualquier obstrucción en la nariz puede provocar dificultades en la respiración, la alimentación e incluso el sueño, pudiendo dar lugar a complicaciones como otitis y otros trastornos.

¿A qué no te lo imaginabas? Pues así es, los bebés -en condiciones normales- solo respiran por la nariz. Algo normal ya que es más cómodo y sencillo. La nariz puede regular la humedad y la temperatura del aire inspirado y sirve de filtro para agentes nocivos. Lo malo viene cuandoe el bebé está congestionado; al no saber respirar por la boca pueden producirse momentos de tensión.

Para lidiar con las dificultades en la respiración debidas a la mucosidad que presentan los bebés durante los primeros meses de vida, expertos en salud infantil recomiendan limpiar, descongestionar e hidratar la nariz del bebé con un solución de agua marina.

Los adultos <a href="https://es.vida-estilo.yahoo.com/post/138982934708/tragarse-los-mocos-es-m%C3%A1s-saludable-que-sonarse?guccounter=1" data-ylk="slk:no sabemos sonarnos bien la nariz;elm:context_link;itc:0;sec:content-canvas" class="link ">no sabemos sonarnos bien la nariz</a> y la mucosidad acumulada puede provocar sinusitis crónica y dolores de cabeza. (Foto: Getty)

La limpieza nasal es un hábito de higiene básico que favorece la hidratación de las mucosas facilitando la respiración del bebé. Para ello, es muy útil el uso del Método Rhinomer Baby, de GSK Consumer Healthcare, ya que elimina eficazmente el exceso de mucosidad y su uso regular mantiene las fosas nasales hidratadas y
protegidas gracias a su fórmula con agua de mar y a su aspirador nasal para bebés.

En comparación con el uso único de una solución isotónica, el Método Rhinomer Baby reduce
alrededor de un 20 por ciento la probabilidad de sufrir otitis media aguda y en un 5 por ciento la probabilidad de sufrir rinosinusitis.

Cuando no pueden respirar por los mocos el llanto suele ser una vía de oxigenación, aunque hay que intentar eliminar la congestión cuanto antes. (Foto: Getty)
Cuando no pueden respirar por los mocos el llanto suele ser una vía de oxigenación, aunque hay que intentar eliminar la congestión cuanto antes. (Foto: Getty)

PASO 1. Lavado

Puedes usar Rhinomer Baby Extra Suave F0 o cualquier otra solución similar que te aconseje tu pediatra. La característica de este producto es que es un agua de mar isotónica cien por cien de origen natural apta para los bebés desde el primer día. Su uso favorece la higiene diaria y prevención activa, ya que limpia y humedece las fosas nasales del bebé protegiéndole contra resfriados y rinofaringitis.

En caso de congestión nasal ayuda a reblandecer la mucosidad para facilitar su eliminación, lo que ayuda a evitar complicaciones como otitis, bronquitis, etc. Además, al ser agua de mar no diluida, mantiene los minerales y oligoelementos del agua de mar (potasio, calcio, magnesio, zinc…) lo que ayuda a reducir la inflamación de la mucosa nasal y presenta propiedades regenerantes de la mucosa.

PASO 2. Aspirar

Es un tema controvertido porque no todos los pediatras (y mamás) son partidarios del uso del aspirador nasal pero los expertos afirman que haciéndolo con suavidad no hay peligro.
Es importante que los recambios sean suaves y blandos, para que así el contacto con la nariz del bebé sea más agradable. Además, su flexibilidad ayuda a una mejor adaptación a la nariz y su filtro absorbente garantiza una buena higiene. Asimismo, los aspiradores suelen ser ergonómicos, por lo que su manejo y sujeción es fácil y cómodo.

Modo de uso de Rhinomer Baby. (Foto: Rhinomer)
Modo de uso de Rhinomer Baby. (Foto: Rhinomer)

Este debe ser un ritual habitual en los bebés, especialmente antes de comer, conviene liberar las fosas nasales porque van a estar muy incómodos y con dificultades para respirar, al menos durante los primeros seis meses. A esa edad su sistema respiratorio ya habrá adquirido la madurez suficiente. Los músculos de la lengua, la cara y el paladar se desarrollan, la epiglotis se desplaza hacia abajo para separarse del paladar blando y dejar más espacio, y pueden empezar a respirar por la boca.

¡Ah! Hay otra característica del aparato respiratorio de los bebés que, aunque tienen menos que ver en el hecho de que no respiren por la boca, también nos interesa. Los bebés tienen la trompa de Eustaquio (un pequeño conducto que conecta el oído medio con la parte posterior de la garganta por detrás de la nariz) en posición más horizontal y es más corta. La trompa de Eustaquio es la encargada de drenar la mucosidad, y estas características hacen que su tarea sea más difícil. También permiten que los virus y bacterias accedan más fácilmente al oído medio. Sus trompas también son más estrechas y blandas, lo que favorece su obstrucción. Por eso, los bebés sufren de otitis más a menudo que los mayores.

Además de los lavados nasales y los aspiradores, los humificadores y la fisioterapia respiratoria serán tus aliados cuando tu bebé este malito.

¿Usas este o otro método para desongestionar la nariz de tu bebé?

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