Si te han empezado a salir canas, esto te interesa

Me han salido mis primeras canas. Ale, ya lo he dicho. No sé si tendrá algo que ver o no, pero ha sido cumplir los 37 y me he empezado a ver pelitos blancos que me confirman que el paso del tiempo no perdona. Si te soy sincera, no es algo que me obsesione, pero no ha sido hasta ahora cuando me ha empezado a interesar más este tema. Pues bien, tengo dos opciones: lucir mis canas con orgullo o disimularlas con algún tratamiento. Lo que sí sé es que no me quiero teñir, así que eso está totalmente descartado. Entonces, ¿qué hago?

Lo que más me han recomendado ha sido que pruebe los barros, la técnica para cubrir las canas favorita de la reina Letizia. Se trata de un tipo de coloración natural y vegetal que está teniendo muchísimo éxito en estos últimos años porque es respetuosa con el cabello y, a diferencia de los tintes tradicionales que terminan dañando el cabello y el cuero cabelludo, es una alternativa totalmente saludable.

"Son una coloración 100% libre de agresión química que pigmenta las capas externas del cabello. Están compuestos por una mezcla de arcillas minerales y plantas tintóreas que no solo aportan color, sino que también protegen el cabello del sol y de las altas temperaturas", me dicen los expertos de Secretos del Agua.

Son aptos para cualquier tipo de cabello, incluso aquellos con canas o muy rizados, y también son ideales para personas sensibles a los tintes químicos y embarazadas. Lo que más me gusta es que no dejan un color completamente uniforme, sino que se ven reflejos que quedan muy bonitos, y, sobre todo, no se marca la raíz, por lo que puedes espaciar mucho más las visitas a la peluquería.

"En cabellos con canas, los barros las transforman en reflejos luminosos sin generar una dependencia ni un efecto raíz, como pasa con los tintes, respetando en todo momento la estructura del cabello y dejando una melena con mucho brillo. Si se desea, también se puede lograr una cobertura completa de canas sin perder la naturalidad y luminosidad, eso ya dependerá del resultado deseado por la clienta y los consejos de un profesional", aseguran los expertos.

En ese sentido, hay diferentes opciones: si quieres disimular las canas, pero sin cambiar demasiado tu color, puedes recurrir a unos barros con un efecto de barniz, aportando brillo y tonalidades muy naturales; y también puedes elegir entre una gran variedad de tonos: desde rubios más claros hasta cobres o rojizos intensos. "Además de cubrir, los barros aportan fuerza, volumen, brillo y luminosidad, contribuyendo a un cuero cabelludo sano y a una melena con profundidad y vitalidad", añaden.

Yo tengo el cuero cabelludo muy sensible y es algo que me preocupa a la hora de probar esta nueva técnica. Desde Secretos del Agua me cuentan que no son agresivos y son mucho más que una coloración: "Son una infusión de vida y color, un tratamiento integral para el cuero cabelludo y el cabello, ayudando a regular las alteraciones y manteniéndolo hidratado y equilibrado".

Si vas a recurrir a los barros para lucir una melena perfecta, ten en cuenta que tu rutina de cuidados en casa debe incluir productos libres de químicos que limpien de una manera respetuosa. Basta con un champú, una mascarilla y un producto de styling, siguiendo la filosofía de 'menos es más'.

Te propongo estos cuatro productos que me encantan y me ayudan a tener un cabello saludable, fácil de manejar y con un brillo maravilloso. Empiezo por la mascarilla hidratante y nutritiva de Gisou, enriquecida con miel y diseñada para reparar el cabello y mejorar su flexibilidad. También me encanta el champú purificante de Secretos del Agua que no tiene sulfatos y equilibra el exceso de grasa. Lo suelo alternar con el exfoliante para el cuero cabelludo de Moroccanoil, que utilizo antes del champú cuando quiero limpiar mi melena en profundidad y renovar completamente el cuero cabelludo.

Por último, otro de mis fichajes estrella es el spray de brillo de René Furterer que uso como paso final de cualquier peinado. Huele riquísimo y queda una melena ultrabrillante pero sin apelmazar, al mismo tiempo que protege la fibra capilar. Es mi favorito desde hace años y no lo cambio por otro.