Volvió el teléfono rojo a Gran Hermano: para qué sirve y cómo puede cambiar el juego

Desde que comenzó hace algunas semanas, la nueva edición de Gran Hermano (Telefe) da que hablar, ya que son muchos los participantes que se encuentran tramando estrategias y alianzas para avanzar y llegar a las instancias finales de la competencia. Ahora, se dio a conocer una nueva incorporación al juego que le pondrá una intensidad extra.

La gran transformación física de Ana, la hermana mayor de Lali Espósito: “Vamos poniéndonos a mano”

Se trata del teléfono rojo, un elemento clave que ya había sido usado en la edición del año 2004, una de las más exitosas del reality de convivencia más famoso del país. Pero como su aparición fue hace mucho tiempo, el público se renonó y entre los seguidores del ciclo comenzó a generarse una gran incertidumbre sobre su utilidad.

Esta sorpresa la dio a conocer Santiago Del Moro durante la gala del jueves, donde contó que a partir de la jornada del lunes, los concursantes deberán sortear este obstáculo crucial para la convivencia dentro de la casa.

La utilidad principal del teléfono rojo dentro de la casa de Gran Hermano es fundamental para el juego de todos los participantes, dado que este podrá sonar en cualquier momento, e incluso varias veces al día.

Una participante de Gran Hermano se quiere ir de la casa

Por lo que dieron a conocer desde la producción y por lo que se pudo ver en ediciones pasadas, los chicos deben atenderlo sí o sí cuando suene, sea la hora que sea. La persona que lo haga va a recibir una noticia que puede ser positiva o negativa. Esto quiere decir que, por ejemplo, aquel que se anime y lo atienda puede quedar automáticamente en placa.

Por el contrario, también podría recibir un premio que lo ayude en la competencia. Incluso existe la posibilidad de obtener el beneficio de sacar o poner a un compañero en placa.

“El teléfono va a sonar con cosas buenas, no tan buenas y otras tremendas”, comenzó diciendo el conductor respecto de uno de los elementos más temidos del juego, y sumó: “Hay que animarse... No es para cualquiera”.