Anne Hathaway desafía el estigma que arrastran las mujeres de 40
Anne Hathaway no se anda con rodeos. Y menos después de cumplir los 40. Se siente cómoda en su propia piel, con suficiente experiencia como para tener las cosas más claras que nunca. Por eso, a esta madre de dos y ganadora del Oscar no le tiembla el pulso a la hora de señalar a quienes cometen el error de adularla diciéndole: "qué bien te ves para tu edad". Porque ella no está envejeciendo, sino que está haciendo otra cosa.
Y es que a esta actriz celebrada por sus películas y por ser el alma de la fiesta bailando Lady Marmalade como si no hubiera un mañana, tendrá una posición privilegiada en Hollywood, pero también conoce los prejuicios que persiguen a las mujeres en su industria y a nivel social. Le tocó conocerlos desde el día que pisó el negocio siendo adolescente, percibiendo las advertencias que circularon durante décadas. Aquellas que decían que la carrera de una actriz protagonista se terminaba al llegar a los 40, propagando el mismo temor que vivieron muchas estrellas. Desde Nicole Kidman a Meryl Streep.
Sin embargo, si bien Anne Hathaway celebra que las cosas hayan cambiado, todavía experimenta los estigmas que rodean el concepto de belleza y envejecimiento femeninos. Una realidad que le toca vivir cuando la gente aplaude su hermosura exterior como si fuera un logro al haber entrado en la cuarta década.
La actriz vertió su mensaje con brutal honestidad durante una entrevista en el programa Today, recordando que comenzó su carrera con 17 años durante una etapa muy diferente. "Existía la percepción de que iba a haber un acantilado. Y ese acantilado llegaba [siendo] muy joven. El mundo ha cambiado desde entonces", explicaba en torno a la noción de que su carrera podía terminarse al llegar a cierta edad.
Sin embargo, todavía le persigue otro estigma desde redes sociales, donde sus propios fans o usuarios en general la felicitan por cómo se ve para su edad. Pero atención, porque Anne tiene algo que decirles a quienes sienten el impulso de hacerle esos comentarios: “No pienso en la edad”, sentencia en la entrevista. “Para mí, envejecer es otra palabra que significa vivir”.
“Si la gente quiere hacerte un cumplido, es bonito. Pero también, sea cual sea el revuelo [en torno de su apariencia a los 40], me interesa lo que está más allá del alboroto”.
De esta manera, Anne Hathaway nos ofrece una mirada cándida sobre el proceso que arrastra el paso del tiempo. Socialmente existe una connotación negativa en torno a la idea del envejecimiento, apoyada por el miedo a sentirse inútil, la pérdida de juventud y eventualmente la muerte. Sin embargo, a las mujeres se les añade el peso de asociar el adiós de la juventud con el fin de la belleza, como si la ausencia de arrugas o un cuerpo perfecto fueran el reflejo idóneo de belleza perdurable.
Y eso es lo que frases como ‘qué bien te ves para tu edad’ estigmatizan. Como a muchas mujeres, a Anne Hathaway tampoco le causa gracia que se la digan. Después de todo, es una frase cargada de estereotipos que muchas mujeres seguimos escuchando como si fuera un piropo, en lugar de detectar las connotaciones que arrastra.
Porque lo que para algunos es un halago inofensivo hacia una mujer madura, en realidad, es una frase que reduce el concepto de belleza femenina a una mirada impositoramente juvenil. Como si verse bien pasada cierta edad debería ser digno de sorpresa. Como si una mujer merece ser piropeada siempre y cuando se vea más joven que otras mujeres de su misma edad. Es edadismo disfrazado de piropo sexista.
Y esto es algo que la actriz de El diablo viste a la moda no quiere representar, lo que explica que haya aceptado ser la nueva embajadora de la línea de cuidados para la piel de Shiseido con un eslogan acorde a su mensaje personal, que dice: “El potencial no tiene edad”.
La intérprete cuenta en la misma entrevista lo mucho que le gusta el mensaje que lanza la línea de cosmética, porque le permite observar cómo las personas jóvenes “tienen mucha más liberad” de la que tuvo ella. “Solo imagina lo que pueden hacer si nunca tienen el concepto de un acantilado, o una vida con fecha de expiración y nada de esas cosas”.
Además, ella está feliz con el momento que está viviendo. “Lo estoy apreciando”, dice sobre su entrada en una nueva década a pocas semanas de cumplir los 41. “Estoy justo en ese punto donde tengo una idea mucho mejor de las cosas que me gusta hacer. Soy mucho mejor compartiendo. Siento que soy más amable conmigo misma y con los demás”. Una declaración de plenitud que cobra más relevancia cuando recordamos la etapa difícil que le tocó vivir cuando su imagen pública estuvo perseguida por críticas y comentarios odiosos.
Que si era muy linda. O demasiado perfecta. O muy impostada. O feliz o falsa… se dijo de todo sobre ella hace 10 años, convirtiéndose en fijación de las redes sociales con una tendencia viral que llevaba el hashtag #hathahaters. Afortunadamente logró superar aquella etapa, asegurando en Women in Hollywood en 2022 (vía Elle) que había decidido que “no tenía ningún deseo de tener nada que ver con ese tipo de energía […] El odio me parece ser lo contrario a la vida”.
En resumen, la actriz nos deja una lección que deberíamos adoptar como parte de la percepción cultural en torno al paso del tiempo. Asociando el envejecimiento con algo tan vital como la acción de vivir cada día. Sin visiones anticuadas en torno a la belleza que nublen la vista. Al final, los años traen consigo experiencias, cambios, maduración… vivencias. Y qué mejor que vivirlos con vitalidad plena.
Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.
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