Yahoo Estilo Los escándalos de Hollywood han despertado una red clandestina de películas que ni las estrellas quieren perderse
El veto a directores como Woody Allen o Roman Polanski ha motivado proyecciones secretas e ilegales de sus películas
Desde que estallara el #MeToo, los estudios de Hollywood han sido muy cautelosos respecto a los cineastas con los que trabajan. Directores rodeados por el escándalo como Roman Polanski, prófugo de la justicia con los cargos pendientes de drogar y violar a una joven de 13 años en los años ‘70; o Woody Allen, cuya controvertida relación con Mia Farrow y su hija Dylan sigue despertando debate; llevan años vetados por la industria, lo que ha impedido que sus últimos trabajos, como la duramente criticada The Palace o la aclamada Golpe de suerte, se hayan podido ver en territorio estadounidense. O al menos, de forma oficial.
Gracias a The Hollywood Reporter, hemos sabido que obras de directores como Polanski o Allen se ha podido disfrutar en la gran pantalla en las esferas cinéfilas de Nueva York, donde aparentemente se ha creado una red clandestina que apuesta por proyectar cintas vetadas por Hollywood de una forma no precisamente legal. El autor del artículo relata que se difunden convocatorias secretas a un local para eventos situado en el East Village, donde la gente debe acudir de incógnito y sin desvelar la información fuera de entornos cinéfilos. Allí, un letrero dibujado a mano con la iconografía de la película que se proyecta guía a los espectadores hasta la sala, en la que dice que incluso se han llegado a ver estrellas de Hollywood.
Los organizadores llaman a este grupo “Woody Allen et 'Movie Friends”, puesto que la motivación para organizar estos eventos clandestinos habría surgido tras la cancelación del estreno de Día lluvioso en Nueva York en 2018, la cinta protagonizada por Timothée Chalamet y Selena Gómez de la que Amazon se desprendió tras resurgir el revuelo en torno a Allen en pleno #MeToo. Se mantienen en el anonimato, pero, según la información de THR, “la mayoría ahora trabaja profesionalmente en la industria cinematográfica”.
Las estrellas de Hollywood son bienvenidas
Precisamente, dicen que fue a Timothée Chalamet a quien se le vio transitando por estos eventos durante su puesta en marcha. Acorde al mencionado medio, no está claro si conocía de este grupo secreto o si pudo ser un encuentro casual, puesto que el East Village siempre ha sido un lugar muy concurrido desde los ‘90. Pero parece claro que entró en la sala y se sentó a disfrutar de la película, o al menos eso señalan los testigos. Según los reportes, en esta primera proyección hubo un problema con el archivo, el film no pudo reproducirse, se terminó marchando y no se le volvió a ver en siguientes eventos. Aun así, valorando que el propio actor renegó de trabajar con Woody Allen, sería un hecho cuanto menos curioso.
“En algunas entrevistas me preguntaron sobre mi decisión de trabajar con Woody Allen el verano pasado. No me quiero lucrar con mi trabajo en la película, y con ese fin voy a donar todo mi salario a tres organizaciones benéficas: Time's Up, el Centro LGBT de Nueva York y RAINN”, escribió en un comunicado en 2018 que fue criticado por Woody Allen en su libro A propósito de nada, donde cargó contra Chalamet acusándole de renegar de su película para no ver afectadas sus opciones al Óscar por Call Me By Your Name.
No obstante, renegar de Allen no implica que no sintiera la tentación de ver uno de sus trabajos en la gran pantalla, sobre todo teniendo en cuenta la cancelación del estreno y que no había tenido ocasión de ver el resultado final. En este caso, Un día lluvioso en Nueva York, tras tener su debut internacional en 2019, pudo disfrutar de un estreno muy limitado en Estados Unidos en 2020 cuando fue adquirida por una pequeña distribuidora independiente llamada MPI Media Group, quien también hizo lo mismo con Rifkin’s Festival, la siguiente película de Allen con Wallace Shawne, Christoph Waltz o Elena Anaya.
Aunque, por el momento, esto no ha ocurrido con Golpe de Suerte, la última cinta de director que fue ampliamente laureada en su estreno en el Festival de Venecia en 2023 y que ha logrado resultados eficientes en la taquilla europea. Por esta razón, este grupo de cinéfilos sigue al pie del cañón organizando estos eventos clandestinos, donde proyectan copias piratas obtenidas a través de servicios de torrent. Como decíamos al principio, no solo lo hacen con Woody Allen, también con otros cineastas vetados como Polanski, de quien también han mostrado la criticada The Palace. Y es que, según la fuente consultada por THR, la gente no acude necesariamente por la calidad de las películas, en mayor medida lo hacen por “el placer de liberar el arte”.
Además, no cobran el precio del boleto porque no buscan el beneficio económico, aunque, de igual forma, al proyectar películas sin tener los derechos y sin permiso alguno de sus responsables, siguen moviéndose al filo de la ley. Pero viendo que la información ha trascendido a la prensa, que lo gestionan personas de la industria y que hasta las mismas estrellas de Hollywood están enteradas, parece un secreto a voces al que se prefiere hacer oídos sordos. Al fin y al cabo, ¿a quién no le tienta la idea de disfrutar de un evento clandestino con contenido de personas polémicas?
Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.
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