Espacios que estimulan y aportan bienestar: la neuroarquitectura y los elementos lúdicos en el diseño de interiores
Numerosos estudios avalan el impacto positivo que tiene el juego en el desarrollo físico, emocional y cognitivo en edades tempranas. Además, también puede ser de gran ayuda en edades más avanzadas, si hay algún miembro de la familia que empieza a mostrar síntomas de deterioro cognitivo. Así que, junto aAlba Méndez,experta en neuroarquitectura, docente y fundadora de Qualia (www.qualiaestudio.com, estudio donde la arquitectura y las neurociencias se dan la mano para diseñar espacios que cuidan de las personas), veremos cómo aplicar elementos lúdicos en el diseño interior de las viviendas. Entre otros asuntos, descubriremos que el juego no es solo una cosa de niños, sino que es beneficioso para todos los miembros de la familia, sin importar su edad.
19
El juego, herramienta de conocimiento y desarrollo
El juego es un estado de ánimo que permite a los humanos salir libremente del mundo ordinario, durante un tiempo limitado, a un mundo mágico con nuevos significados y nuevas reglas, tanto los significados como las reglas son susceptibles de ser cambiados dependiendo de la imaginación de los jugadores. Se trata del lenguaje natural con el que los niños se comunican con el mundo que los rodea. Jugando expresan sus emociones, aprenden y construyen su identidad. Desde un punto de vista heideggeriano jugar es ‘un modo de ser en el mundo’. Y para los niños, es su estado natural de ser en el mundo.
Johan Huizinga se refiere a estos mundos temporales como ‘círculos mágicos’ (mundos temporales dentro del mundo ordinario, dedicados a la realización de un acto aparte). Ese acto es un acto de libertad, jugar es voluntario y el juego permite moldear el mundo libremente y sin limitaciones, la única limitación es la imaginación.
“Para aquellas familias en las que alguno de los infantes está diagnosticado con trastorno del espectro autista (TEA), hace poco se publicó un estudio que destaca la importancia del juego en la relación madre-hijo en niños), subrayando cómo estas interacciones son esenciales para el desarrollo social y emocional dentro del entorno familiar. El análisis reveló que las madres, mediante el juego, pueden modular comportamientos clave en sus hijos, favoreciendo su desarrollo integral y mejorando la dinámica familiar en el día a día”, detalla Alba.
29
Razones para favorecer los espacios de juegos en casa
La experta en neuroarquitectura resume todo lo que aporta a los niños el juego, que fomenta el desarrollo cognitivo, así como las habilidades sociales, emocionales y físicas:
● Es una actividad que fortalece los lazos afectivos entre los miembros de la familia.
● Permite a los adultos conocer más a sus hijos, ya que el juego es el idioma en el que más y mejor se expresan los niños.
● Favorece comportamientos positivos para socializar y comunicarse con los demás.
● Brinda al niño un espacio de confianza y seguridad.
● Influye positivamente en la salud de los niños.
● Aporta experiencias alegres y significativas.
● Fomenta la creatividad y el pensamiento crítico.
Este rincón de juegos lo ha ideado Qualia.
39
¿Y si no tengo espacio para un cuarto de juegos?
Alba considera que se pueden crear espacios lúdicos incluso en hogares pequeños, en lo que no se puede integrar un cuarto destinado específicamente al juego. De hecho, afirma que “para aplicar un enfoque en el diseño de espacios que fomenten el juego de los niños, resulta esencial crear un entorno que no solo estimule la creatividad y el juego libre, sino que también promueva el desarrollo integral del niño, tanto a nivel cognitivo, como emocional como fisiológico. El objetivo es diseñar espacios que ofrezcan la libertad necesaria para que los niños exploren, inventen, y se relacionen con su entorno de manera lúdica, al tiempo que se promueve la seguridad y la autonomía”.
Es importante diseñar un entorno en el que los niños se sientan seguros para equivocarse y explorar sin temor a ser juzgados. Estas áreas deben ser lo suficientemente versátiles para generar confianza y crear espacios seguros donde los niños se atrevan a experimentar. Por ejemplo, pequeñas áreas privadas o rincones dentro del hogar pueden convertirse en espacios donde los niños jueguen de manera autónoma sin la constante supervisión de adultos.
En este dormitorio juvenil para tres hermanos, diseñado por WOHA, el espacio no se destina solo al descanso, también se dispersan zonas donde poder estudiar, practicar deportes o jugar.
49
El desafío, un aspecto crucial
Los espacios deben presentar retos que estén en línea con el nivel de habilidades de los niños, pero que también promuevan su desarrollo. Vygotsky sugirió que el juego crea una "zona de desarrollo próximo", donde los niños se comportan de manera que va más allá de su nivel actual.
“Esto se puede lograr diseñando áreas de juego que ofrezcan la oportunidad de resolver problemas, crear estructuras o juegos que exijan un esfuerzo mental o físico, pero que sean alcanzables con persistencia. Los niños deben sentir que, aunque un desafío sea difícil, pueden lograrlo con el tiempo, lo que refuerza su confianza y habilidades”, revela la experta.
Por ejemplo, en la reforma de esta casa The Room Studio propone un dormitorio infantil con un altillo tipo rincón secreto, donde poder leer o jugar.
59
Secretos de diseño
Aparte de todos los aspectos ya mencionados, para mantener el interés de los niños, los espacios deben ser lo suficientemente flexibles para permitir novedad y cambio.
¡Las actividades monótonas corren el riesgo de volverse rutinarias y perder su aspecto lúdico! Alba sugiere “crear espacios que se pueden reorganizar fácilmente, con elementos móviles o desmontables, permitiendo a los niños redescubrir su entorno cada vez que juegan, manteniendo así su interés y motivación para explorar”.
En la propuesta, un salón del que se adueñan los ‘peques’ de la casa con elementos textiles galácticos de la firma Lorena Canals.
69
La importancia de las metáforas y narrativas
El diseño de los espacios debe tener en cuenta el uso de metáforas y narrativas. “Los niños a menudo interpretan su entorno en función de las historias que construyen en su mente. Incorporar elementos que los inviten a crear narrativas propias —como estructuras abstractas o componentes que puedan ser reimaginados como diferentes objetos— les permite sumergirse en mundos imaginarios, enriqueciendo su experiencia de juego y ayudando a que cada espacio cobre un significado único y personal”, subraya la arquitecta especializada en neurociencas.
En este ambiente de Circu se introduce un divertido balancín que hace las delicias de personas mayores y jóvenes.
79
¿Cómo pueden los adultos beneficiarse del juego dentro del hogar?
Los adultos pueden beneficiarse enormemente del juego dentro del hogar al lograr lo que muchos padres desean: ver a sus hijos felices y compartir experiencias significativas con ellos. El juego no solo fortalece los lazos emocionales, sino que también ayuda a crear recuerdos compartidos que los niños guardarán como parte de su historia personal. A través del juego, los adultos tienen la oportunidad de acompañar y observar cómo sus hijos aprenden y desarrollan su mejor versión, en un entorno de alegría y exploración.
“Los niños nacen con una carga genética, como si trajeran un libro en blanco bajo el brazo, pero ese libro se completa con las experiencias que viven. Cada experiencia lúdica contribuye a la escritura de ese libro, moldeando su crecimiento y permitiendo que se conviertan en personas plenas y seguras. Para los adultos, ser parte de este proceso es un privilegio y un regalo que fortalece la conexión familiar y el bienestar mutuo”, relata Alba.
89
Jugar a todas las edades
Si no tienes hijos, también puedes jugar en edad adulta. De hecho, aunque algunas personas pueden considerar el juego como una actividad improductiva o una pérdida de tiempo, numerosos profesionales de la psicología y la psiquiatría han evidenciado que el juego está profundamente integrado en el cerebro humano y desempeña un papel crucial como motor de motivación básico. En particular, el juego para adultos resulta especialmente beneficioso para aliviar el estrés y la ansiedad.
Además, “un estudio realizado en Suiza con 255 personas de hasta 65 años demostró que aquellos que dedicaban más tiempo a actividades divertidas con otras personas experimentaban una vida mucho más satisfactoria y mantenían una mejor forma física”, detalla la fundadora del estudio de arquitectura Qualia.
99
El juego no debe limitarse a la infancia
Integrar el juego en el diseño interior es esencial, independientemente de la presencia de niños en el hogar. La filosofía del juego promueve un ambiente de creatividad, relajación y conexión emocional, que beneficia a todas las edades. Incluso en la vida adulta, es fundamental crear espacios que inviten a la diversión y al disfrute, ya que esto fomenta el bienestar general y la salud mental.
“Incorporar elementos lúdicos en la decoración y el diseño, como muebles modulares, áreas de descanso acogedoras o elementos decorativos interactivos, puede ayudar a los adultos a liberar tensiones y a reconectar con su lado más creativo”, propone Alba.
Así, al integrar el juego en nuestros espacios, no solo cultivamos un ambiente más alegre y dinámico, sino que también nos permitimos explorar nuevas formas de relacionarnos con nuestro entorno y con nosotros mismos, equilibrando la necesidad de conectar con la realidad con el deseo de disfrutar de momentos lúdicos.