La verdadera historia del casting que dejó sin opciones a Britney Spears en 'Diario de una pasión'

Britney Spears ha abierto la caja de Pandora con la publicación de sus memorias. Después de ser el centro de la atención mediática a lo largo de toda su carrera, la cantante ha despertado una nueva ola de curiosidad a raíz de las anécdotas personales que vierte en su esperado libro. Y a juzgar por la cantidad de historias que están circulando entre la prensa, fans y lectores, estamos ante un nivel de curiosidad imparable. Como demuestra el video de su casting para Diario de una pasión que hizo en 2002 y que la coronó como una de las finalistas para el papel protagonista.

El director de casting, Matthew Barry, compartió el vídeo con The Daily Mail y, en cuestión de horas, alcanzaba cotas virales en todas las redes sociales, generando conversación pero, sobre todo, disparando la imaginación en torno a cómo hubiera sido el drama romántico si la estrella de Toxic hubiera acompañado a Ryan Gosling. Porque, en pocas palabras, lo hace genial.

No obstante, antes de dejar que la imaginación nos lleve por conclusiones erróneas, debemos recordar que existe un motivo por el cual Rachel McAdams consiguió el personaje de Allie y no Britney Spears. Un motivo que habla de pasión y química pero, sobre todo, muchas lágrimas.

“Britney no sólo fue buena, sino fenomenal”, dijo Barry al tabloide británico. “Fue una decisión difícil. Britney nos dejó boquiabiertos a todos. Nuestras mandíbulas estaban en el suelo. Me quedé asombrado. Absolutamente impresionado. Ella dio su mejor juego ese día”. Y no se equivoca.

En el vídeo compartido, que solo podemos ver en The Daily Mail (está siendo eliminado de redes sociales por cuestiones de derechos), se puede ver el compromiso de la cantante, pausando sus palabras y cambiando su acento sureño para que no marque demasiado sus oraciones. Pero, sobre todo, tomándose su tiempo para que las emociones del personaje afloren con ese discurso desesperado de Allie, dividida entre lo que siente su corazón cuando está cerca de Noah y el compromiso que le debe a su prometido hasta que le brotan las lágrimas.

Spears hizo la audición para el papel de la protagonista femenina, la joven caprichosa que estaba indecisa entre dos hombres en los años ’40: el romántico empedernido y apasionado Noah que la saca de sus casillas (Gosling) y el seguro y estable Lon Hammond (James Marsden). Según añadió el director de casting, la cantante “superó a varias de las mejores actrices” del momento, como “Scarlett Johansson, Claire Danes, Kate Bosworth, Amy Adams, Jamie King y Mandy Moore”.

“Britney las venció a todas. Toda actriz que era alguien ese año quería este papel”, sentenció.

Y las reacciones no se hicieron esperar. Si bien la cantante explica en sus memorias, The woman in me, que se alegra de no haber hecho la película porque "en lugar de trabajar en mi álbum 'In the Zone', habría estado actuando como una heredera de los años '40 día y noche" (vía People), las especulaciones parecen ser inevitables. Porque, desde el momento que el vídeo comenzó a circular por redes sociales y comprobáramos que los halagos del director de casting estaban acertados, la imaginación se disparó con decenas de publicaciones en Instagram, Tik Tok y X alabando a Britney e imaginando cómo hubiera sido la película ahora que podemos verla claramente en el personaje. No obstante, no pretendo pincharle el globo a nadie, pero por mucho que Britney haya sido “fenomenal”, existe un motivo que explica que no consiguiera el personaje. Y ese motivo es Rachel McAdams.

En una película como Diario de una pasión era imprescindible que la pareja protagonista irradiara química, se complementara y vendiera esa historia de amor eterno a las masas. Y si bien Britney Spears y Ryan Gosling podrían haber construido esa química recurriendo a la amistad infantil que compartieron a los 12 años cuando trabajaron en El club de Mickey Mouse, una vez que Rachel McAdams entró en escena, no hubo marcha atrás.

Según explica un vídeo sobre el rodaje presentado por Fandango, la actriz apenas tuvo una noche para preparar su audición, familiarizarse con el guion, el personaje y la historia. Y aun así hizo un casting memorable.

Gosling explica en el vídeo que Rachel los sorprendió al llegar preparada, sin preguntas ni necesidad de explicaciones. Y cuando llegaron al corazón de la audición, no había ni un lagrimal seco en la habitación. De hecho, el director de casting tuvo que detener la grabación para buscar un pañuelo y secarse las lágrimas ante la emotividad que emanaba Rachel.

“Así que nos sentamos a hacer la primera escena y Nick [Cassavetes, el director] dijo: 'Está bien, hagamos la siguiente escena' e hicimos la siguiente escena y todos estábamos llorando y Matthew Berry, el director de casting, ‘estaba filmando y tuvo que detenerse y buscar un pañuelo de papel y esas cosas’", recordaba McAdams. “Fue muy lindo”.

Al llegar a la tercera y última escena ya los tenía en el bolsillo. La química que compartía con Ryan Gosling los tenía a todos comprados, definiendo su casting como “la mejor experiencia [en una audición] que tuvo jamás”. “Entré a esa habitación y estaba en otro mundo”, dijo la actriz. “Simplemente no podía recuperar el aliento”. Curiosamente, su audición lleva varios años pululando por redes sociales, demostrando precisamente por qué emocionó tanto y terminó arrebatándole el papel a Britney Spears.

De todos modos, Ryan Gosling y Rachel McAdams llevaron esa química por un terreno pantanoso en los primeros días de rodaje. Tenían tantas diferencias creativas que el actor llegó a pedir que la reemplazaran con otra actriz, al sentir que no podía actuar a su lado. La situación escaló en una fuerte discusión donde, según contó Nick Cassavetes a VH1 (vía Time), se gritaron y dijeron de todo. No obstante, airear sus frustraciones ayudó porque, después de aquel día, todo fluyó. Tanto que terminaron transformando aquella química en un amor real que duró dos años.

En resumen, Britney Spears nos estará sorprendiendo con su convincente audición, acaparando titulares y la conversación viral con el despertar del imaginario colectivo añorando suponer cómo hubiera sido Diario de una pasión con ella como protagonista. Pero no podemos olvidar que existe un motivo por el cual Rachel McAdams consiguió superarla. Y fue el torbellino emocional que provocó con su casting, demostrando que a pesar de tener solo una noche para prepararse, era la candidata perfecta para un personaje que ayudaría a definir el éxito de Diario de una pasión como un clásico moderno del cine romántico.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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