Yahoo Estilo Mariska Hargitay: de la terrible tragedia en la que casi pierde la vida a hacer historia con 'La ley y el orden'
Ahora que se estrena en Latinoamérica la temporada 22 de 'Law & Order: SVU', convirtiéndola en la serie de acción en vivo en horario estelar de mayor duración en la historia de la televisión, Mariska Hargitay vuelve a ser tendencia y es perfectamente comprensible por qué: la bella actriz se ha convertido en sinónimo de Olivia Benson, la entrañable, compleja y formidable protagonista de la serie.
Hargitay, nacida el 23 de enero de 1964, ha sido la estrella de ‘La ley y el orden: unidad de víctimas especiales’ desde 1999. Es tal su fama e influencia como el personaje, que hasta Taylor Swift nombró a uno de sus gatos "Olivia Benson" y lo anunció orgullosamente en Instagram.
Además de haberse convertido en una actriz de éxito, Mariska está casada con un marido devoto (el también actor Peter Hermann, que aparece ocasionalmente en la serie) y ha criado a tres hijos. Sin embargo, su vida no siempre fue un cuento de hadas. De hecho, la actriz, célebre por un personaje fuerte, ha tenido su parte de tragedias, y todo comenzó cuando tenía solo 3 años de edad.
Como muchos saben, la madre de Mariska fue la despampanante estrella de cine Jayne Mansfield, rubia platinada, de bellas facciones y abundante carisma, era conocida por sus papeles en ‘The Girl Can’t Help It’ y por aparecer al lado de Cary Grant en ‘Kiss Them for Me’, entre numerosas comedias de los años 50, en las que era competencia directa de Marilyn Monroe, y una famosa foto de una cena en la que aparece al lado de Sophia Loren (que no puede evitar mirarle el escote) es una de las imágenes más icónicas de esa época en Hollywood. Su padre era Mickey Hargitay, fisicoculturista, actor y ex Mr. Universe. Ellos se conocieron en 1956 y se casaron, siendo el segundo matrimonio para cada uno. Jayne solo llevaba una semana divorciada de Paul Mansfield cuando se casó con Mickey, y por supuesto, corrieron ríos de tinta en revistas y diarios.
La pareja hizo cuatro películas juntos y tuvieron tres hijos, Mickey Jr., Zoltan y Mariska. El matrimonio terminó divorciándose en el verano de 1964 después de un par de años de indecisión y poco después del nacimiento de la pequeña. Y aunque mantenían una relación amable, solo unos años después, la tragedia llegó inesperadamente el 29 de junio de 1967 cuando Mansfield y otros dos pasajeros (su prometido Sam Brody y el chauffeur Ronnie Harrison) murieron en un brutal accidente automovilístico en el que también estuvieron presentes los niños.
Mariska, que tenía 3 años en ese momento, y sus dos hermanos, Mickey y Zoltan, dormían en el asiento trasero y aunque resultaron gravemente lesionados, sobrevivieron de milagro. El auto se dirigía por la Ruta 90 desde Biloxi, Mississippi, donde Jayne acababa de actuar en un club nocturno, a Nueva Orleans; eran alrededor de las 2 de la madrugada cuando el automóvil se estrelló contra la parte trasera de un camión y solo los adultos murieron. Jayne Mansfield tenía 34 años en el momento de su prematura muerte.
Las autoridades dijeron que ella murió instantáneamente y Mariska todavía tiene una cicatriz evidente en un lado de la cabeza por el accidente.
Hargitay no recuerda el accidente, pero dijo a la revista People que "perder [a mi] madre a una edad tan temprana es la cicatriz de mi alma”. Y agregó que sin embargo “siento que finalmente eso me convirtió en la persona que soy hoy. Entiendo el viaje de la vida. Tuve que pasar por lo que hice para estar aquí”.
En una entrevista para Entertainment Weekly en 2009, Mariska explicó cómo lidió con su pérdida más adelante en su vida: “La forma en que he vivido con la pérdida es apoyándome en ella. Como dice el refrán, la única salida es ir a través. En mi vida, ciertamente, he tratado de evitar el dolor, la pérdida, sentir cosas [...] No digo que sea fácil, y ciertamente no lo ha sido para mí. Ha habido mucha oscuridad. Pero por otro lado, las cosas pueden ser muy brillantes".
Después de la muerte de su madre, Mariska fue criada por Mickey y su tercera esposa, Ellen, quien era una sobrecargo con quien estuvo casado por el resto de su vida y que fungió como su madre adoptiva, a la que quiso mucho siempre, aunque la imagen de su madre permaneció siempre presente.
"Mi madre era un símbolo sexual asombroso, hermoso y glamoroso, pero la gente no sabía que tocaba el violín y el piano, que tenía un coeficiente intelectual de 160 y tenía cinco hijos y amaba a los perros", dijo Hargitay. “Ella era muy adelantada a su tiempo. Tenía este apetito por la vida y creo que lo comparto con ella".
El estrellato de Mariska no se debió necesariamente a que fuera hija de padres famosos. Ella decidió embarcarse en su propia carrera como actriz a partir de mediados de la década de los 80. Comenzó a estudiar teatro en UCLA, consiguiendo todos los trabajos que suele conseguir una aspirante a actriz: una película de terror, pilotos que no tuvieron éxito, y apariciones en series como ‘Falcon Crest’, ' Seinfeld' y 'ER ' (donde tuvo algunos episodios en 1996).
Mariska tardó mucho en convertirse en una estrella; de hecho, no fue hasta los 35 años que consiguió su papel de Olivia Benson. Antes de eso, luchó por abrirse camino: “Interpreté a muchas ‘tomboys’, vistiendo camisas de franela, jeans y botas”, dijo Hargitay en una entrevista al USA Today en el año 2000. “En algún nivel inconsciente, rehuía los roles muy sexualizados, supongo, por mi madre. Pero a medida que fui creciendo, cambié de opinión”. De hecho, recordó que en su audición para ‘Law & Order’, le dijo al creador Dick Wolf en su primer callback: "¡Yo soy Olivia Benson!”.
“En Hollywood, cumples 35 años y se acabó tu carrera. Por eso me vine a buscar trabajo a Nueva York, porque es un mundo diferente”, dijo. Yy aquí me encontré a Dick Wolf, que creyó en mí”. Aunque no imaginaba que estaba a punto de comenzar un viaje de más de 20 años en la televisión y hacer historia: la serie se ha convertido en un sello cultural, como un drama serio sobre crímenes reales con un contenido muy humano.
El éxito es innegable y muy merecido: a partir de 2018, Mariska ocupa el puesto número 4 en la lista de Forbes de las actrices mejor pagadas en televisión, ganando 13 millones de dólares y su rol ha sido ejemplar para muchas mujeres: "Olivia es una mujer extremadamente independiente y profesional que busca algún tipo de sentido de la justicia en el mundo", dijo describiendo a su personaje. “Es completamente empática y siente las cosas profundamente. Creo que es una detective sin precedentes en la televisión. Se le permite ser mujer y cálida en un mundo de hombres".
Por esta interpretación, Hargitay, que es reconocida por ser carismática y cálida, ha ganado numerosos premios, entre ellos dos Globos de Oro, un Emmy y, en 2018, recibió el premio People’s Choice a 'Estrella Favorita de Drama de Televisión'. También ha dirigido un puñado de episodios e incluso se convirtió en productora en 2014. Claramente, conseguir el papel de la Detective Benson fue el gran momento de su carrera y su vida. Algo que sin duda, y después de años de estrecheces y luchas, la vino a compensar de haber sufrido (y superado) una tragedia tan terrible, al inicio de su vida.
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