Muere Andre Braugher, el actor que dio la espalda a los brillos de Hollywood

Andre Braugher, el actor ganador de dos premios Emmy y personaje emblemático de la televisión, ha fallecido el pasado lunes tras una breve enfermedad. Tenía 61 años. Conocido por la exitosa serie policial Brooklyn Nine-Nine, el actor parte habiendo dejado huella en la historia de Hollywood con una presencia tan seria y elegante que instantáneamente provocaba respeto. Estudió en una de las escuelas más prestigiosas de arte dramático, desbordaba talento y tuvo una amplia carrera en cine y televisión, sin embargo, nunca convivió con los brillos de Tinseltown. Y fue por elección propia.

Quizás no lo sepan, pero Andrew Braugher podría fácilmente pasar a la historia como el actor que más veces interpretó a figuras de las fuerzas del orden. Fue general, policía, sargento o detective en varias ocasiones mientras, entre medias, se colaban figuras paralelas que también encajaban con esa presencia tan creíblemente imponente. Como médicos, abogados, secretario de estado, jueces o fiscales.

La ley y el orden: Unidad de Víctimas Especiales, Dr. House, Agente Salt, Los 4 Fantásticos y Silver Surfer, Poseidon o Un ángel enamorado fueron algunos de sus proyectos aunque el mundo lo reconoce por haber interpretado al inolvidable Raymong Holt, un policía homosexual que ascendía a capitán en las ocho temporadas de Brooklyn Nine-Nine (2013-2021) y la serie detectivesca donde desarmaba a criminales en los interrogatorios, Homicide: Life on the Street (1993-1998).

Estuvo transitando el universo hollywoodense desde finales de los ‘80s. Fue nominado al Emmy -el premio más prestigioso de la televisión- en once ocasiones, ganándolo por Homicide en 1998 y por la miniserie Thief en 2006 (donde curiosamente se volcó a la otra cara de la moneda interpretando a un ladrón). Sin embargo, a pesar de convivir tan cerca con los brillos de Hollywood, nunca se dejó encandilar. Su prioridad más importante no era la industria, sino estar cerca de su familia.

LA FAMILIA ANTES QUE HOLLYWOOD

Andre nació en Chicago en 1962 y creció en un barrio asolado por el crimen, en el seno de una familia que quería que llegara lejos en la vida. Su padre trabajaba como operador de maquinaria pesada para el estado y su madre para el Servicio Postal y, según New York Times, su progenitor revisaba su tarea escolar todas las noches y lo obligaba a rehacerla si había manchas o borraduras. La dedicación dio sus frutos y Andre consiguió una beca para la prestigiosa Universidad de Stanford donde su padre esperaba que se graduara con un título en ingeniera. Sin embargo, cuando Andre descubrió la actuación a través de una obra escolar de Hamlet, no hubo vuelta atrás. Había encontrado su pasión.

Su padre no entendía la profesión que quería seguir. No comprendía cómo iba a conseguir ganarse la vida. “¿Qué carajos vas a hacer, malabarismos y viajar por el país?”, le preguntó. Pero el joven Andre supo demostrarle que su plan iba en serio y empezó a hacer su camino en cine, televisión y teatro.

Braugher se casó en 1991 con la actriz Ami Brabson, formando su propia familia con tres hijos que criaron en Nueva Jersey. Lejos de los brillos y focos de Hollywood. En realidad, según New York Times, Andre nunca se sintió seducido por la ciudad de las luces ni le gustaba salir cuando estaba en Los Angeles. Estar presente para su esposa y sus hijos era más importante que viajar por el mundo con películas y series, desapareciendo de la rutina familiar por amor al arte. Por ejemplo, los ocho años que pasó siendo el alma central de Brooklyn Nine-Nine, trabajaba en Los Angeles pero volaba cada fin de semana para estar con su familia en Nueva Jersey. En la otra punta de su país.

“En el camino tomé la decisión de que Ami y esos chicos eran demasiado importantes para no pasar mucho tiempo con ellos”, dijo a Variety en 2020. “Tanto la crisis de salud como la crisis de democracia que estamos atravesando me demuestran que no hay sustancia en el brillo. El enfoque en la celebridad no es real. Así que elegí, a mi manera, abandonar [la opción de Hollywood]”.

Su esposa era su consejera, su compañera en la toma de decisiones. “Tenemos ideas afines; crecimos en barrios similares; Compartimos los mismos valores”, dijo sobre Brabson a Variety. "Ella me conoce como la palma de su mano y estoy agradecido por eso". Con ella ensayaba las frases de su diálogos cada mañana antes de salir de casa, y con ella tomó la decisión de abandonar su sueño de aparecer en Broadway cuando la pandemia de Covid-19 estaba comenzando a expandirse.

Si bien pudo haber abierto sus alas y exponerse a los focos mediáticos que, tal vez, le habrían acercado otras oportunidades, la verdad es que no fue algo que le quitara el sueño. Él mismo reconoció en la mencionada entrevista a Variety que tuvo una “carrera interesante”, que “podría haber sido más grande”, pero entonces habría tenido que sacrificar lo más especial en su vida. “Creo que podría haberse expandido hacia más disciplinas: dirigir, producir, todas esas cosas. Pero habría sido a costa de mi propia vida”, admitió hace tres años.

Es cierto que los prejuicios raciales de Hollywood probablemente no le brindaron las mismas oportunidades que a otros intérpretes. Esto era algo que lo hacía sentir “frustrado”, ya que no tenía tantas audiciones como hubiera querido pero, de todos modos, supo aprovechar al máximo sus oportunidades dejando huella.

Y en lugar de los brillos y flashes de Hollywood, Andre Braugher se sentía orgulloso de estar en casa y disponible para cuando su familia lo necesitara. “No he estado en Australia. No he estado en Praga. No rodé en San Paolo o lo que sea”, decía a Variety. “Tengo tres hijos varones y quiero que me conozcan como alguien más que el tipo que los llevaba al circo de vez en cuando. Quería estar presente a través del curso de sus vidas porque se lo importante que son los padres”. Y eso mismo hizo sin dejar que los focos de Hollywood encandilaran su propósito.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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