¿Realmente sabes cómo cargar a tu gato? Los expertos opinan
Los gatos son animales misteriosos y extraños para algunos, quizá porque insistimos en compararlos con los perros. Su ronroneo y su costumbre de presionar sus patas sobre sus dueños, son solo dos ejemplos de sus peculiaridades. Sin embargo, tampoco debemos asumir que se cargan igual que un can. Así que toma nota de estas tres técnicas, porque puede que lo hayas estado haciendo mal desde el principio.
1. Técnica de balón
Uri Burstyn, médico veterinario, compartió un video en Youtube en el que enseña esta técnica que, asegura, sería ideal para cuando tienes prisa o poco tiempo y necesitas transportar a tu gato.
Consiste en colocar una mano en el vientre de tu gato, y cargarlo llevando su cabeza bajo tu brazo, mientras con la otra mano sostienes su trasero.
Aunque resulta una técnica poco común, Burstyn asegura que es muy recomendable porque si lo presionas bien contra tu cuerpo, el gato se sentirá seguro, además de que en esa posición no puede arañarte ni escaparse.
2. Clásica a dos manos
Por su parte, la Sociedad Americana para la Prevención de la Crueldad hacia los Animales (ASPCA, por sus siglas en inglés), recomienda esta técnica.
Consiste en poner una mano entre sus patas delanteras, y que su pecho descanse en tu antebrazo, mientras que la otra mano se pone bajos sus patas traseras. Hecho esto lo puedes alzar, manteniéndolo a nivel, y luego lo puedes acercar a tu pecho. Incluso, después puede deslizar la mano del pecho para sostener sus patas.
Es la misma técnica que recomienda Mikkel Becker, entrenadora y consultora de comportamiento para perros y gatos, quien además segura que cuantas más partes de tu gato toquen tu cuerpo, más cómodo y relajado estará.
3. Con un solo brazo
De acuerdo con la ASPCA Pro, esta técnica aplicaría solo para gatos tranquilos y sociables, porque van más expuestos.
Consiste en rodear al gato con un solo brazo, asegurando que sus patas traseras panza descansen sobre tu antebrazo, pegados a tu cuerpo. El pecho del gato descansa sobre la mano de ese mismo brazo. La otra mano va libre, y con ella puedes acariciar a tu gato o frenarlo en caso de ser necesario.
Qué considerar antes de cargar a un gato
No a todos los gatos les gusta que los carguen, o al menos no todo el tiempo. El portal Mother Nature recomienda que prestes atención a su lenguaje corporal. Por lo general si tienen la cola baja, o entre las patas, o las orejas planas, es señal de que no quiere ser acariciado ni cargado.
Los gatos pueden espantarse con facilidad o ponerse ansiosos cuando no se sienten en control o no tienen suficiente espacio para escapar. Por eso, si se agita o retuerce mientras lo estás cargando, bájalo y déjalo estar. No los cargues contra voluntad.
¿Cómo saber si lo estás haciendo bien? Simple, si el gato se relaja cuando lo cargas e incluso comienza a ronronear, es buena señal.
Qué no debes hacer
El portal especializado en mascotas PetMD comparte algunos consejos a considerar al cargar a los gatos desde cachorros, que al ponerlos en práctica asegurará que con el tiempo se sientan más seguros cuando lo hagas.
No los cargues de la nuca. Este método solo debe ser utilizado por sus madres. Si lo haces tú, puedes lastimarlo.
Siempre levántalos despacio, para que no se espanten y pierdan estabilidad.
No los cargues de las patas ni de las axilas. Además de ser incómodo, puedes lastimarlos.
No los cargues del collar.
¿Conoces otra forma de cargar cómodamente a un gato? Cuéntanos.
@travesabarros
También te puede interesar:
Datos curiosos sobre los dientes de tu gato
¿Cómo cambia tu gato tras ser castrado?