Los reyes Felipe y Letizia asisten al funeral de Juan Gómez-Acebo en Madrid para arropar a la familia
Con gesto serio y de riguroso luto, los reyes Felipe y Letizia han arropado a la familia de Juan Gómez-Acebo en el funeral por su memoria que se desarrollaba este domingo en Madrid. La Iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas era el escenario donde el soberano y su esposa acudían para dar su apoyo y aliento a los seres queridos del fallecido, primo hermano del monarca.
Poco antes de las ocho y media de la tarde, los Reyes llegaban caminando hasta las puertas del templo, donde primero se paraban para saludar brevemente a la multitud mientras recibían aplausos de los muchos curiosos que se han agolpado en los alrededores de la Iglesia Castrense.
Seguidamente, una vez han cruzado la valla del recinto, eran recibidos por los hermanos del difunto, Simoneta, Bruno y Beltrán, momento en el que veíamos cómo doña Letizia daba sus condolencias a la mayor de ellos con gestos de cariño. Todo antes de que diera comienzo un acto privado que, tal y como adelantó ¡HOLA!, ha reunido allí a numerosos miembros de la familia Borbón.
Entre ellos, se encontraban Juan Carlos I y doña Sofía, así como la infanta Cristina acompañadas por sus hijos Pablo, Miguel e Irene Urdangarin, y su prima Alexia de Grecia. Felipe y Victoria de Marichalar tampoco han faltado a la cita, mientras que la infanta Elena no pudo acudir al encontrarse en la ceremonia de clausura de los Juegos Paralímpicos de París.
Nada más llegar, el que fuera jefe del Estado se ha fundido en un cariñoso abrazo con su sobrino Bruno Gómez-Acebo. También doña Sofía ofrecía consuelo a los familiares, entre ellos la viuda de Juan, Teresa Véret, en este momento de tanta tristeza tras la dura pérdida de hace menos de un mes. Tal y como desveló ¡HOLA! esta semana, el padre de Felipe VI vino procedente de su residencia en Abu Dabi en vuelo regular y se ha hospedado en un hotel.
La misa en honor a Juan Gómez-Acebo ha sido oficiada por el padre Serafín en la Iglesia Catedral de las Fuerzas Armadas de la capital, lugar hasta el que se han desplazado familiares y amigos del difunto. Funeral que se vivía apenas unas horas después del entierro del que fuera el segundo de los cinco hijos de los duques de Badajoz, celebrado este mediodía en el cementerio sacramental de San Isidro.
Tanto en el sepelio de esta mañana como en el servicio religioso posterior de la tarde, los hermanos del fallecido han recibido el pésame de los asistentes y, en este sentido, era Bruno el encargado de recibirles a las puertas del templo. Ahí, se repetían las escenas de dolor y consuelo, en forma de besos y abrazos, para intentar levantar el ánimo de los afectados.
Entre los presentes se encontraban la infanta Margarita y su marido, Carlos Zurita con sus hijos María y Alfonso; Pedro de Borbón-Dos Sicilias y Orleans, duque de Calabria; Cristina de Borbón Dos Sicilias y su madre, Ana de Orleans; Teresa de Borbón-Dos Sicilias y Borbón-Parma y su marido, Iñigo Moreno de Artega; Eugenia Martínez de Irujo, duquesa de Montoro, y su esposo Narcís Rebollo; Constantino de Bulgaria y su mujer, María García de la Rasilla, o Beatriz de Orleans, entre otros.
Al funeral han asistido igualmente Nadia Halamandari, viuda de Fernando Gómez-Acebo; y José Miguel Fernández Sastrón, exmarido de Simoneta Gómez-Acebo y padre de sus tres hijos; quien ha señalado que "si viniese toda la gente que le quiere de verdad a Juan, no caben" en este templo, decía en declaraciones a Europa Press.
Allí estaban también Teresa Urquijo con su hermano Juan, su madre Beatriz Moreno y de Borbón y su abuela Piru Urquijo; así como Blanca Suelves, duquesa de Alburquerque, y Joaquín Güell; la empresaria Paloma Segrelles o la representante de artistas Mariola Orellana, la mujer de Antonio Carmona que es gran amiga de la organizadora del Rastrillo de Nuevo Futuro.
Otros de los presentes en la misa eran Alfonso de Borbón y Yordi, marido de la top model Eugenia Silva; Xandra Falcó, marquesa de Maribel; el extorero Miguel Báez 'El Litri' y su esposa, Casilda Ybarra de Fontcuberta, nieta de los marqueses de Bellamar; María Chávarri y Javier Soto Fitz-James Stuart, Laura Vecino y Nicolás Vallejo-Nágera, entre otros. En definitiva, una alta representación de la realeza y la aristocracia española que no hace sino demostrar lo querido que era Juan y lo es, por extensión, la familia Gómez-Acebo.
Finalizado el acto y ya siendo de noche, eran los Reyes los primeros en salir de la iglesia, con doña Letizia cogida del brazo de don Felipe mientras esperaban un vehículo en el que se han marchado del lugar. Seguidamente, eran Juan Carlos I y la reina Sofía quien abandonaban el templo.
El que era vizconde de la Torre moría tristemente hace unas semanas a los 54 años a causa del cáncer que padecía, noticia que conocimos el pasado 12 de agosto mientras veraneaba con los suyos en Mallorca. Fue en en el tanatorio de Calvià donde se abrió su capilla ardiente para, después, ser incinerado allí y posteriormente traer sus cenizas hasta Madrid.
Tras recibir sepultura este domingo 7 de septiembre al mediodía, sus restos descansan ya en el panteón familiar donde se encuentran sus padres, la recordada infanta Pilar y el empresario Luis Gómez-Acebo, así como su hermano Fernando, que también nos dejó prematuramente a principios del pasado marzo a los 49 años.
En el último adiós a Juan que ha tenido lugar esta mañana, también acudía el rey Felipe y su hermana, la infanta Cristina, esta última acompañada por tres de sus cuatro hijos. Entre los asistentes se encontraban igualmente Cristina de Borbón-Dos Sicilias y Pedro López-Quesada, así como los hermanos Zurita, María y Alfonso.
De la misma manera, allí estaban los tres hijos que Simoneta Gómez-Acebo tuvo durante su matrimonio con José Miguel Fernández Sastrón: Luis (33 años), Pablo (29) y María de las Mercedes (23). Bruno, por su parte, acudía con su mujer Bárbara Cano, mientras que Beltrán hacía lo propio con Andrea Pascual. Laura Ponte, que estuvo casada con Beltrán Gómez-Acebo y es madre de sus dos hijos mayores: Luis (19) y Laura (18), también acompañó a la familia en este delicado momento.