Yahoo Estilo La faceta olvidada de Ryan Gosling que hizo icónico su 'I'm Just Ken' en los Oscar
La implicación del actor en su actuación hizo que se convirtiera en un momento inolvidable de la historia de los premios
Más allá de la victoria de Oppenheimer, si hay algo que definió la gala de los Oscar fue el protagonismo de Ryan Gosling. El actor de Barbie conquistó a los espectadores y a las estrellas presentes en el Dolby Theater de Los Ángeles con su actuación de I’m Just Ken, su canción de la película sobre la muñeca de Mattel que tanta sensación despertó el pasado 2023.
Solo hay que ver la euforia que se vio en pantalla o cómo las redes ardieron ante ese número que, además de aludir a la cinta de Greta Gerwig y Margot Robbie con una orquesta de 40 músicos y 65 bailarines, venía cargado de homenajes a clásicos de Hollywood, como el caso de Los caballeros las prefieren rubias de Marilyn Monroe.
Eso sí, el talento de Gosling para sacar adelante la actuación no se queda en lo que vimos en pantalla, ya que todos los responsables tras este instante de los Oscar han salido a hablar maravillas de cómo el actor de Diario de una pasión o La La Land gestionó su concepción y puesta en marcha. Sin embargo, no es algo que deba extrañarnos, porque, aunque de normal solo veamos su lado interpretativo, su faceta como artista siempre ha ido más allá del dar vida a personajes en cine y televisión.
El sello de Ryan Gosling
“Ese hombre, Ryan Gosling es un verdadero profesional; nos reunimos con él a través de Zooms hace meses para hablar sobre esa actuación”, dijo a Variety Molly McNearney, productora del número de I’m Just Ken en los Oscar junto a Raj Kapoor, Katy Mullan y Rob Paine. “Greta Gerwig también intervino creativamente. Estaba muy comprometido con ello. Su coreógrafa, Mandy Moore, es excepcional: estuvo en todas las convocatorias. También Mark Ronson”.
Según McNearney, todas las ideas en torno a la actuación surgieron de su mente: La estructura del número, las coreografías, el homenaje al clásico de Monroe, el gesto de dar voz a Greta, Margot y América Ferrera o su interacción con Emma Stone apelando a nuestra nostalgia por La La Land. "Él fue bastante claro acerca de la estructura general", dijo su coreógrafa. “Era realmente importante para él saltar e incluir a Margot, Greta y America. Dijo: 'Realmente necesito a esas señoras que están al frente, porque voy a acercarme a ellas'. Quiero que canten'”.
Además, cuenta que Gosling, del que destaca su amabilidad y cercanía durante todo el proceso, fue especialmente cuidadoso y milimétrico con cada detalle, como cuando gestó el beso a la mano de un camarógrafo. “Dijo: '¿Podemos asegurarnos de que Sean, el cámara, esté bien si le beso la mano?'”, destacaba sobre este momento que implicaba un contacto físico con alguien externo y que podría haber derivado a una situación incómoda sin una planificación previa.
Pero eso no es todo, porque, con el número ya ejecutado y con toda la sala estallando en vítores hacia Gosling y su trabajo, el actor siguió preocupado sobre su ejecución y de cada uno de los movimientos que había realizado sobre el escenario. “Simplemente me dio un abrazo enorme”, dijo sobre la reacción del actor tras la actuación. “Luego se puso muy serio y preguntó: '¿Fueron correctas las tomas? ¿Hice un buen trabajo? “Yo le dije, '¡Sí! Dios mío, ¿estás bromeando? ¿Escuchaste a esa gente? ¡Estaban enloquecidos!'”.
El talento de Gosling más allá de su faceta actoral
Desde luego, esta implicación y desempeño no es nada usual. En un show como los Oscar, lo normal es que una productora se encargue de diseñar cada uno de los segmentos del programa, de hacer las propuestas a cada uno de los implicados y de conducir a las estrellas a seguir los pasos necesarios para su ejecución, no que un icono de la talla de Gosling, de los que normalmente suelen pecar de lucir su estrellato y dejar de lado la parte engorrosa del trabajo, se encargue casi al 100% de todo.
Sin embargo, en este caso no hablamos de una estrella cualquiera. Gosling, además de actor, es alguien curtido en muchas otras esferas del mundo del espectáculo. No hay más que ver que de pequeño debutó en shows de televisión como The Mickey Mouse Club, que sus actuaciones infantiles sobre los escenarios ya daban mucho que hablar o que incluso desarrolló una carrera musical de la mano de Dead Man's Bones.
La banda era un dúo donde Gosling prestaba su voz y tocaba la guitarra y piano, mientras su amigo Zach Shields estaba en batería y percusión. Lanzaron un álbum homónimo en 2009, centrado en canciones relacionadas con lo sobrenatural y espeluznante, mientras que actuaron en vivo con interpretaciones diseñadas en torno al terror.
Por ello, no debería de extrañarnos que tenga esta concepción tan amplia, meticulosa y humana en producción que ha dado pie a un número histórico en los Oscar como el de I’m Just Ken. Es una faceta que muchos desconocíamos, aunque tras ver este resultado y conocer todo lo que ha envuelto a este proceso creativo difícilmente vamos a poder olvidar.
Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine 54.
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