El uniforme cómodo de Kendall Jenner fuera de la pasarela que copiaremos en la oficina
Tras llegar a su fin los desfiles de moda masculina que han tenido lugar estos días en ciudades como Florencia y París, comienza este lunes la semana de la Alta Costura, uno de los eventos más prestigiosos del sector que hasta el jueves reunirá en la capital francesa a numerosos rostros conocidos, invitados a presenciar en directo las piezas únicas que las firmas presentan. Kendall Jenner era una de las primeras en aterrizar en la ciudad, aunque no en calidad de asistente, sino como protagonista del show que ha ofrecido Schiaparelli.
La firma de origen italiano ha inaugurado la jornada con sus creaciones de Primavera/Verano 2025, contando entre sus filas con Alex Consani -nombrada 'Modelo del Año' en 2024- y Kendall Jenner, quien ya ha protagonizado el primer momentazo viral de esta Haute Couture. Y es que el vestido encorsetado con una falda desestructurada que ha lucido sobre la tarima, obra de Daniel Roseberry, ha dejado al público boquiabierto.
Pero la hija del clan Kardashian no solo ha suscitado interés dentro del desfile, sino también fuera de este y gracias a sus elecciones cómodas pero sofisticadas. En los últimos años, ha sorprendido con su capacidad de cambiar radicalmente de imagen bajo las órdenes de diferentes diseñadores para lucir sus creaciones. Pero cuando se baja de la pasarela, no duda en defender la comodidad con conjuntos prácticos con los que se ha convertido en la reina del minimalismo chic.
Son precisamente estos estilismos por los que apostaba en París, conjuntos todoterreno con los que acudía antes del desfile para las pruebas de vestuario y peinado. Nos hemos fijado en que la también empresaria sigue una sencilla fórmula a la hora de vestir: crear una base con un pantalón negro de traje y un calzado del mismo color, para después optar por americanas especiales que transformen estos básicos.
Lo hacía el lunes antes de que comenzase el espectáculo, con una original blazer de cuero marrón con doble solapa firmada por The Row. Un diseño que llevaba junto a unos botines de puntera afilada de la misma firma y un bolso de lo más exclusivo: el Hermès Birkin 30 Fauve fabricado en ante, uno de los modelos más complicados de encontrar junto al Himalaya, pues su producción es tan escasa que se ha consolidado como una pieza de coleccionista que ronda los 100.000 euros en algunas plataformas de lujo de segunda mano, donde siempre está agotado.
Este mismo método aplicaba también el domingo, con unos pantalones negros muy similares a los que daba un toque elegante, conjuntando una amplia americana estructurada con estampado de cuadros, de Bottega Veneta, junto a una camisa de rayas de la misma marca. Una fusión de prints que funciona y que completaba con unos mocasines de cuero, uno de los calzados que más repite en su día a día.
"Me encanta ir con zapato plano, aunque los tacones son divertidos. Cuando era pequeña se los robaba a mi madre y con mi hermana Kylie jugábamos a desfilar en casa", contaba Kendall Jenner en una entrevista con Vogue Hong Kong. Admite que algunos días no le importa su aspecto demasiado e intenta no vestirse para complacer a los demás. "Me gusta mezclar lo masculino y lo femenino. Y me encanta ir cómoda, cuando era niña solo llevaba ropa de chico. Mi equipo a veces intenta convencerme de que sea más femenina y nos enzarzamos en una batalla", aseguraba con humor.