'Vidas pasadas', la piedra en el camino de los blockbusters que aspiran al Óscar

La carrera hacia los premios Óscar ya es oficial. La 33 ceremonia de los Gotham Awards fue la encargada de dar el pistoletazo de salida a una competencia que estará marcada por las galas, alfombras rojas, cenas y exposición mediática donde la industria del cine se cruzará a lo largo de dos meses y medio hasta llegar a la gran noche agendada para el 10 de marzo de 2024.

Y si bien debemos esperar hasta el 23 de enero para conocer a los nominados y descubrir si las grandes producciones volverán a liderar como antaño de la mano de Oppenheimer, Barbie o Los asesinos de la luna, podemos decir que existe una candidata que parte con la primera ventaja.

Se trata de Vidas pasadas, la flamante ganadora de los Gotham Awards, los premios dedicados a la industria del cine independiente, que se alzó con el galardón a la Mejor Película en la ceremonia celebrada el 27 de noviembre. Un premio que le permite partir con ventaja al tratarse de un reconocimiento que alberga una conexión histórica con los premios Óscar.

Y es que la mayoría de películas que consiguieron el mismo reconocimiento no solo estuvieron nominadas a la estatuilla dorada a Mejor Película, sino que fueron ganadoras de varios premios, incluyendo el galardón máximo. Es el caso de Zona de miedo, Birdman, En primera plana, Luz de luna, Nomadland y, la más reciente ganadora, Todo en todas partes al mismo tiempo.

En otras palabras… ¿podría repetirse la historia del fenómeno protagonizado por Michelle Yeoh que después de ganar el Gotham arrasó en toda la temporada hasta alzarle con el Óscar? ¿Es posible que una película independiente deje a los blockbusters con las manos vacías de nuevo? Si, es probable.

LA APUESTA SENSIBLE EN MEDIO DE BLOCKBUSTERS POTENTES

Vidas pasadas cautivó a la crítica desde comienzos de año durante su paso por los festivales de Sundance y Berlín. Desde entonces se posicionó como una de las fuertes candidatas a los Óscar de 2024, y si bien tan solo acumula $19.9 millones recaudados en taquilla (cuando tuvo un presupuesto de $12 millones) frente a los cientos de millones cosechados por el fenómeno 'Barbenheimer', el premio de los Gotham la coloca a la par y en la misma carrera hacia los Óscar.

Todavía es pronto para definir cuáles serán las diez nominadas a Mejor Película a ciencia cierta, pero eso no evita que hagamos nuestras predicciones. En líneas generales existe un aparente consenso a favor de Oppenheimer, Barbie, Los asesinos de la luna, Pobres criaturas, Maestro y Secretos de un escándalo (por supuesto circulan más títulos entre los rumores de la ‘oscarología’ -como Ferrari, The iron claw, The color purple- pero su lugar en la temporada está por verse).

Todas ellas producciones que cuentan con estrellas de Hollywood reconocidas, directores de prestigio y estudios potentes detrás. Desde cineastas como Christopher Nolan a Martin Scorsese, Greta Gerwig, Bradley Cooper, Todd Haynes y Yórgos Lánthimos. Actores de la talla de Cillian Murphy, Margot Robbie, Ryan Gosling, Robert De Niro, Leonardo DiCaprio, Emma Stone, Carey Mulligan, Natalie Portman y Julianne Moore. A estudios como Warner Bros., Fox Searchlight, Apple, Universal y Netflix. Es decir, nombres que cualquier entrega de premios desea tener en sus galas para cautivar la atención, los focos y la audiencia televisiva.

No obstante, en medio de este tsunami de producciones con sabor a Hollywood, emerge Vidas pasadas, una producción independiente, dirigida por una debutante, protagonizada por actores desconocidos por el gran público que, además, pertenece a un estudio que pisa fuerte como A24: la nueva pesadilla de los grandes. Y es que A24 pasó de ser una compañía conocida por sus retorcidas (pero efectivas) películas de terror a convertirse en un eslabón potente de la temporada de premios tras ganar el Óscar en 2023 con Todo en todas partes al mismo tiempo.

¿POR QUÉ VIDAS PASADAS PISA FUERTE?

Escrita y dirigida por Celine Song, Vidas pasadas aborda temas como la existencia de las almas gemelas pero con una narrativa delicada, sutil, elegante y sencilla a través del concepto budista y coreano de ‘In-Yeon’. Es decir, el reconocimiento de la conexión y destino entre dos personas a través de la reencarnación.

La película supone el debut de Song detrás de las cámaras y cuenta la historia de Nora (Greta Lee) y Hae Sunt (Teo Yoo), dos amigos de la infancia en Corea que se separan cuando la familia de Nora emigra a Canadá. La película rastrea la conexión que mantienen en la distancia a través de diferentes décadas. El tiempo pasa y consiguen reencontrarse 20 años más tarde, retratando una historia sobre los tiempos de la vida, las cuentas pendientes en el amor y el significado del destino.

Vidas pasadas es una película que conmueve a través de las sutilezas pero que cuenta una historia tan profundamente romántica que atraviesa la pantalla. Es una película que hace suspirar. Que se queda grabada. Que no se olvida.

Y es que estamos ante una historia que identifica al ser humano y el concepto del amor, que se siente innovadora y clásica al mismo tiempo al tratar temas tan imperecederos como el destino y el amor. Es una película auténtica y personal donde Celine Song vertió detalles de su vida para retratar una historia cercana. Y es que ella misma, al igual que Nora, es una dramaturga que emigró de Corea a Canadá cuando era niña y ahora vive en Nueva York con su marido.

Y es así, con una construcción elegante y sutil de una historia de amor tan profunda como sencilla, que Vidas pasadas se cuela en la temporada de premios y entre pesos pesados como la imponente Oppenheimer con toda su grandiosidad técnica, su mensaje arrollador sobre la autodestrucción del ser humano y sus $100 millones de presupuesto. O el fenómeno de Barbie que pintó al mundo de color rosa coronándose como la película más taquillera del año con $1.440 millones cuando costó $128 millones. O acompañando en la misma temporada de premios a la obra maestra de Martin Scorsese, Los asesinos de la luna, con su mensaje contra la egolatría y supremacía blanca impuesta sobre los nativos americanos y, también, con sus $200 millones de presupuesto.

Sin olvidar a Bradley Cooper con su imponente biopic sobre los claroscuros de la vida del compositor Leonard Bernstein con Maestro o la punzante comedia dramática de Todd Haynes, Secretos de un escándalo, que invita a dejarse llevar por la exposición de temas tabús al estar inspirada en el caso real de una maestra estadounidense que mantuvo relaciones sexuales con un estudiante y luego se casó con él. Entre medias de todas ellas surge Vidas pasadas, una propuesta sutil e independiente que recuerda cómo propuestas que tocaban la humanidad con sencillez como Nomadland y CODA conquistaron a Hollywood hasta llevarse el Óscar.

Y con el Gotham ya tiene un pie adentro en esta carrera que recién comienza, coronándose como un obstáculo evidente para las grandilocuentes producciones que se encaminan hacia el Óscar al volver a colocar una historia que derrite desde la más pura sencillez sin necesidad de presupuestos desorbitados ni nombres destacados.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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