Will Smith y la reprimenda de Steven Spielberg que lo salvó de un error fatal en su carrera

La carrera de Will Smith siempre había ido sobre ruedas. Desde que se convirtió en estrella con El príncipe del rap de Bel-Air, sus éxitos se han contado a montones y, salvo algún fracaso como Wild Wild West, siempre había tenido a toda la industria rendida a sus pies hasta el polémico bofetón en los Oscar.

Aunque sus logros no llegaron por arte de magia. De hecho, en sus comienzos en Hollywood pudo cometer errores graves que habrían limitado su carrera, como el querer rechazar uno de los papeles que más prestigio de le dio. Por suerte, voces experimentadas de la industria, como su agente o el director Steven Spielberg, impidieron que su inexperiencia le jugara una mala pasada.

Smith, en una entrevista con con Kevin Hart en su programa Hart to Heart, reconoció que no solía tener buen ojo para elegir proyectos. Entre los 90 y los 2000, fue su exagente James Lassiter quien le hizo recular para protagonizar éxitos como En busca de la felicidad o Ali, a los que no vio potencial en un inicio. Sin embargo, cuando le insistió para protagonizar Hombres de negro, rechazó tajantemente el consejo, ya que venía de trabajar en Día de la independencia y no quería ligarse en exceso al género de la ciencia-ficción y los extraterrestres.

"En mi apogeo, en las 10 películas que hice en la cima de mi carrera, James era quien elegía los proyectos", dijo a Kevin Hart. “Simplemente tenía buen ojo. Yo no quería hacer En busca de la felicidad. No quería hacer 'Ali'. Y James eligió Hombres de negro. Eché un vistazo a Hombres de negro, pero no quería hacerla. Fue al año siguiente de Día de la Independencia, así que no quería hacer dos películas de extraterrestres seguidas”. Sin embargo, la decisión de Smith no sentó bien a Steven Spielberg, que producía la película bajo su productora Amblin Entertainment.

Aunque ya era un icono de la comedia y la música gracias a El príncipe del rap de Bel-Air, todavía estaba construyendo su estrellato como héroe de acción. No obstante, el éxito de Dos policías rebeldes o Día de la independencia hizo que el director de Tiburón tuviera claro que Smith se convertiría en uno de los mayores reclamos del género. Por ello, revolvió cielo y tierra para que cambiara de opinión y protagonizara su película, para lo que requirió de una estrategia un tanto surrealista.

La experiencia surrealista con Steven Spielberg

Según el actor, Steven Spielberg lo invitó a una velada a su casa para discutir la cuestión. Pero no fue una invitación cualquiera, ya que puso a su alcance todo tipo de lujos e incluso mandó que lo fueran a buscar en helicóptero. "Steven Spielberg me envió un helicóptero para hablar conmigo", destacaba. “Estaba en Nueva York. Aterricé en su casa, y ya me tenía antes de saludarme. Fue la primera vez que tomé limonada con agua carbonatada. No puedes decir que no a eso”.

Aunque lo más reseñable vino después, cuando el director no se anduvo con rodeos, sacó pecho de sus logros, le destacó la oportunidad tan grande que estaba dejando marchar con Hombres de Negro y le echó en cara el rechazar trabajar con él tan a la ligera. Acorde a las palabras de Smith, la cálida bienvenida derivó a una conversación fría en la que Spielberg no paraba de criticarlo y que en última instancia le hizo sentir mal. "Dijo la m*erda más fría posible", agregaba. “Él dijo: 'Dime por qué no quieres hacer mi película' Él era el productor, y puso los puntos suspensivos al final, era el punto, punto, punto. Si hubiera continuado, habría dicho: 'sabes que hice 'Tiburón', sabes que hice ET…’, ¿verdad?”.

Tanto le impactó la reprimenda de Spielberg que acabó cediendo a protagonizar Hombres de negro junto a Tommy Lee Jones, una decisión que desde luego no lamentaría. La película se convirtió en uno de los mayores éxitos de los 90, recaudó 589 millones de dólares en la taquilla mundial y lanzó una de las franquicias más populares de Hollywood.

Además, tras los éxitos de Dos policías rebeldes y Día de la independencia, conseguir un tercer taquillazo consecutivo solidificó su estatus de estrella de cine y se erigió como una de las personalidades más prolíferas de la industria, lo que años más tarde continuó ejemplificando con éxitos como Enemigo público, Alí, Yo, Robot, En busca de la felicidad o Soy leyenda.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine 54.

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