Yahoo Estilo 'Cómplices del engaño' lleva a Adria Arjona a vivir su sueño en Hollywood
La hija mayor de Ricardo Arjona se planta firme en la meca del cine con un éxito redondo
Si Con todos menos contigo sirvió para proclamar a Glen Powell como nuestra estrella de Hollywood, su nueva película hace lo mismo para su compañera, Adria Arjona. Porque en Cómplices del engaño la hija mayor de Ricardo Arjona despliega su arsenal creativo, jugando con el sex-appeal, la comedia y el absurdo de la historia, consiguiendo un éxito redondo que la está ayudando a cumplir su sueño en la meca del cine.
Es cierto que esta actriz de 32 años lleva más de una década viviendo las mieles del ascenso profesional a través de series y películas populares. Sin embargo, es ahora que consigue uno de los privilegios más anhelados por cualquier actor, justo cuando Cómplices del engaño tiene a la crítica metida en el bolsillo y el público se rinde a sus pies: posee un aprobado rotundo del 96% por parte de los profesionales en el agregador de críticas Rotten Tomatoes y un 93% por parte de la audiencia.
La película dirigida por Richard Linklater (Boyhood) lleva generando expectación desde la buena aceptación que obtuvo en los festivales de Venecia y Toronto en septiembre de 2023, mientras que varios países la convirtieron en fenómeno de Netflix en las últimas semanas. Y ahora le toca a México, Argentina y Chile descubrirla (otros países de Latinoamérica deberán esperar unas semanas más), gracias a su estreno en cines el 20 de junio.
Una comedia que rompe esquemas
Vagamente basada un artículo del Texas Monthly escrito por Skip Hollandsworth y coescrito por los nativos de Texas, el director Richard Linklater y Glen Powell, Cómplices del engaño cuenta la historia de un profesor universitario serio y rutinario llamado Gary Johnson (Powell) que, a su vez, trabaja para la policía asistiendo al departamento encargado de atrapar a personas que intentan contratar asesinos a sueldo. Sin embargo, después de una serie de incidentes, lo terminan ascendiendo a agente encubierto, disfrazándose y transformándose en cada misión para pretender ser el asesino que esos futuros criminales pretenden contratar.
Todo va sobre ruedas hasta que aparece Madison (Arjona), una mujer que pretende contratarlo para que asesine a su marido abusador y manipulador. Sin embargo, las chispas vuelan entre los dos, derivando en una comedia de enredos con sabor a cine negro y con el brillante ingrediente de la química explosiva que comparten los protagonistas.
De esta manera, después de una serie de aventuras en roles secundarios a través de películas como Titantes del Pacífico: La insurrección (2018), Triple frontera (2019) o el remake de El padre de la novia (2022), y series de éxito como la segunda temporada de True Detective (2015), Good Omens (2019) o más recientemente Andor (2022) del universo de Star Wars, Adria Arjona salta al protagonismo estelar a través de una producción que le permitió desafiarse como nunca. Y que la está llevando a recoger los frutos del esfuerzo por todo lo alto.
Nace una estrella
Nacida en Puerto Rico en 1992, Adria Arjona creció entre su país de nacimiento (y el de su madre, la modelo Leslie Torres), Guatemala (el país de su padre), México y Miami, desarrollando raíces diversas que la conectan con su identidad latinoamericana desde diferentes culturas, según reveló a Harper's Bazaar. Tuvo una infancia nómada, acompañando al cantautor en sus giras, hasta que llegó el momento de emprender su propio camino. Lo hizo tras cumplir los 18, mudándose a Nueva York para estudiar en el prestigioso Instituto de Teatro y Cine Lee Strasberg mientras trabajaba turnos dobles como camarera.
Consiguió sus primeros trabajos como actriz dos años más tarde hasta que True Detective le sirvió una plataforma perfecta para hacerse notar en Hollywood. Un proyecto llevó al otro hasta que un día recibió la llamada de Richard Linklater. El popular cineasta conocido por clásicos como El último día de clases, Escuela de rock o la trilogía Antes, sabía que la joven actriz era perfecta para el papel de Madison pero, primero, debía descubrir si tenía química con Glen Powell. Así que organizó una reunión para que se conocieran en persona. Sin embargo, lo que iba a ser un encuentro de una hora terminó siendo una charla divertida de cinco con tequila de por medio.
Descubrieron que tenían muchas cosas en común, como el amor incondicional por la familia y una química explosiva. De esas que no pueden crearse con artilugios cinematográficos. De esas que la cámara capta sin demasiado esfuerzo. “La primera vez que lo conocí, supe desde el principio que podía confiar en él”, dijo Arjona a Elle. “Teníamos muchas cosas en común. Ambos venimos de una gran familia. Amamos a nuestra familia y esa fue la primera conexión que tuvimos entre nosotros”. Y así, entre una charla divertida, tequila y una amistad floreciendo, Adria Arjona aceptó sumarse al proyecto sin leer el guion y Glen Powell confirmó que la quería como compañera esa misma noche (Harper's Bazaar).
Sin embargo, como el personaje de Madison era un esqueleto en el guion original, Adria Arjona tuvo la oportunidad única de formar parte del proceso creativo. Ayudó a moldear el papel y crear la sexy e intensa relación que comparte con Gary, dando forma a las escenas sexuales y las diferentes capas de Madison. Esto permitió crear un ambiente de confianza y seguridad. Un colchón perfecto para dar rienda suelta a la creatividad, siendo la primera vez que Adria tuvo libertad creativa en un proyecto hollywoodense, según dijo a Elle.
"Lo que Rick y Glen me regalaron es que me permitieron ser parte del proceso de creación de estas escenas", dijo a la publicación. "Tuve la propiedad de lo que estaba sucediendo, de cómo se filmaba. Y Rick hizo eso. Ningún otro director con el que he trabajado, hombre o mujer, me dio la palabra: “Así es como debe ser”. Y es importante para la historia y es divertido. Estás viendo a estas dos personas estar locamente enamoradas y pasándolo bien. Sabía que Glen me respaldaba. Tenía la espalda de Glen. No podría haber sido más respetuoso".
En consecuencia, esta oportunidad de colaboración la estaría ayudando a plantarse en Hollywood como una estrella en potencia. Porque según confesó a Entertainment Weekly, fue un “desafío” llevar a cabo el proyecto pero, al formar parte del trasfondo creativo y alcanzar el éxito, las cosas estarían cambiando para ella y Glen Powell.
“Simplemente nos permite tener más voz en lo que hacemos a continuación y esa parte es algo que compartimos que es realmente emocionante, que tenemos la capacidad de elegir”, aseguró. “Eso es algo a lo que creo que un actor siempre aspira y siempre sueña, y ahora estoy empezando a saborearlo un poco”.
Es decir, Adria Arjona habría alcanzado ese momento dulce donde un actor puede elegir proyectos por placer, convicción o gusto personal, sin necesidad laboral ni urgencia por demostrar de lo que es capaz. Cuando un actor logra reconocimiento e interés en la industria. Cuando el estrellato toca a su puerta.
Todos aquellos que veanCómplices del engaño descubrirán enseguida por qué sirve como punto de inflexión en su carrera. Adria Arjona se hace notar atreviéndose al absurdo, lo políticamente incorrecto y la creación de una relación explosiva a través de personajes que brillan al unísono.
Su personaje juega en la liga de las femme fatales pero desde una perspectiva diferente al tratarse de una mujer compleja, que busca reinventarse y amoldarse a quien cree que es su nuevo amor (un asesino a sueldo). Este enredo tan simple permite jugar con aristas más arriesgadas a las comedias románticas que solemos ver últimamente, donde Hollywood se mantiene encorsetado por miedo a despertar la furia de la cancelación.
La química entre Glen y Adria es la fuerza explosiva donde transita la historia y ambos actores la exprimen al máximo, dando resultado una rom-com refrescante, conscientemente absurda que sirve como entretenimiento asegurado.
Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.
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