El día que María Félix montó en cólera porque revelaron su secreto más íntimo
Pocas figuras más llenas de contradicciones ha habido en la farándula mexicana como María Félix, "La Doña", la actriz más polémica y conocida que ha dado el país; desde su primera aparición en cine en 1942 en la cinta 'El peñón de las ánimas' hasta su muerte, no había declaración de María que no levantara controversia y su imagen era una de glamour mezclado con temperamento muy fuerte.
Incurrir en su enojo era algo temible — se rehusó a besar a cámara a Emilio Tuero, compañero suyo en 'Vértigo' porque afirmaba que él tenía mal aliento y lo humilló en público frente a todo el staff y al director Antonio Momplet — y sus rabietas podían poner a temblar a cualquiera. Pero nadie la hizo enojar tanto como el célebre escritor y periodista mexicano de origen asturiano Paco Ignacio Taibo I (padre del novelista policiaco y hoy funcionario gubernamental obradorista, así como del aclamado poeta y novelista Benito Taibo y de Carlos Taibo, productor de 'La casa de las flores'), cuando este reveló su secreto mejor guardado.
Taibo y la Félix se conocieron a principios de los años 60, cuando ella estaba casada con el banquero francés Alex Berger y ya era una estrella internacional; Taibo había llegado a México acompañado por su familia en 1959, tras abandonar España debido a sus diferencias políticas con el régimen, en pos de nuevas oportunidades y pronto se colocó como un importante periodista cultural.
Sus entrevistas con María sirvieron para darle la idea de hacer una biografía acerca de ella — algo que no se había intentado antes: María Félix era muy controladora sobre su vida privada, en torno a la cual ella misma había creado una leyenda. Si bien entre ellos se dio una buena relación amistosa (la Félix incluso llegó a autografiarle una foto en la que había escrito: "para Paco Taibo, de su amiga María Félix, que lo quiere. Y mucho") ella era hermética sobre algunos aspectos de su historia, especialmente con uno: su edad.
Nacida en Álamos, Sonora, un 8 de abril, la actriz siempre había dicho que había nacido en 1920 o 1922 (cuando se dignaba a hablar de su edad), pero en 1985, cuando por fin comenzó a escribir su libro 'María Félix: 47 pasos por el cine', Taibo viajó a Álamos para recabar información acerca de la diva y al hacer lo más elemental, visitar el registro civil para obtener una partida de nacimiento, se encontró con que María de los Ángeles Félix Güereña nació, hija de Bernardo Félix Flores y Josefina Güereña Rosas, efectivamente un 8 de abril, pero de 1914, por lo que se había "rasurado" 6 o 7 años de edad para su imagen pública.
Esta no es una práctica desconocida entre actrices y cantantes, pero en el caso de la Doña era algo inusitado: nadie sabía a ciencia cierta su verdadero año de nacimiento y cuando el libro se publicó, bajo el sello Planeta en 1986, fue un verdadero escándalo que el autor incluyera una copia certificada del acta en su documentación y expusiera lo que María consideraba el secreto que más le importaba guardar (antes había preferido la especulación de un posible incesto con su hermano mayor Pablo, tema que había tratado de manera oblicua en entrevistas, a decir cuántos años tenía de verdad).
La reacción de la actriz, ya para entonces viuda de Berger, relacionada con el artista plástico Antoine Tzapoff y prácticamente retirada de la actuación (aún si ese año se hablaba de que volvería a las pantallas como protagonista de 'Insólito esplendor', un filme que realizaría Jaime Humberto Hermosillo, que finalmente no se filmó, aunque ella cobró una fuerte suma en dólares por contrato), fue una verdadera tempestad.
María montó en cólera: negó tajantemente que fuera verdad lo que el documento hallado por Taibo señalaba con evidencia, aunque no demostró, porque no podía, lo contrario. Esto hizo que la amenaza de demandarlo por calumnias no prosperara, pero fue quizá el último gran berrinche de la protagonista de 'Enamorada' y 'La estrella vacía'. Desde ese momento, desconoció al afable escritor, en cuya mesa de la colonia Hipódromo había estado como invitada de él y su esposa Maricarmen —quien por décadas fue considerada una de las anfitrionas más célebres de la capital mexicana, por la élite cultural del país, que celebraba su cocina y atenciones— y literalmente lo dio por muerto, poniendo punto final a 25 años de cordial amistad.
Taibo nunca reculó al respecto del contenido de su libro, que es imparcial, analítico y justo con su apreciación de la actriz en su carrera fílmica, y aunque la publicación, que obviamente fue un best-seller internacional colmando las listas de los más vendidos en España, Francia, Colombia y México, fue objeto de crítica por parte de muchos fans y allegados de la actriz, tuvo un defensor inesperado: Enrique Álvarez Félix, hijo único de la diva, nacido en 1936 y fallecido a los 60 años de edad, quien se refirió en una ocasión al libro como "la valoración más justa que se ha hecho de la vida y carrera de mi madre jamás escrita, aunque a ella no le guste".
Cuando María murió el 8 de abril de 2002, en su cumpleaños 88 mientras dormía, en casa de Taibo (quien falleció en noviembre de 2008) no dejaban de sonar los teléfonos: todo el mundo quería un comentario suyo, quizá buscando algo salaz o amargo, pero el también creador de una enciclopedia sobre el cine mudo y de una extensa biografía de Emilio 'Indio' Fernández (otra figura compleja en el cine nacional), solo tuvo palabras amables para la extinta estrella, recordando sus buenos años de amistad y señalando que, aún si le había causado algo de pena que ella le hubiera retirado la amistad, él estaba satisfecho de haber realizado un trabajo de calidad y honesto, que contaba simplemente la verdad, algo que a él lo distinguió siempre: su buen humor y su rectitud.
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