El personaje de 'La Sirenita' que Disney mantuvo en el más absoluto misterio con razón

Aun con cambios ligeros en la historia, el remake de La Sirenita apostó por ser fiel al clásico Disney de 1989. Es cierto que personajes como Flounder, Sebastián o Scuttle no parecen tener cabida en una versión realista en imagen real, al igual que algunos números musicales pensados para el formato animado, pero la casa Mouse ha querido priorizar la nostalgia a buscar un nuevo enfoque para contarnos otra vez la historia de Ariel.

Desde los primeros trailers, la sensación de que iba a ser una copia plano a plano de la película original se fue incrementando, sobre todo porque a medida que se acercaba el estreno, el material promocional nos bombardeaba con momentos icónicos. Por ejemplo, la escenografía de Parte de él, Bajo el mar o Bésala se nos desveló casi al completo, al igual que muchas de las interacciones más recordadas de Ariel y el príncipe Eric. No había lugar para el misterio o la sorpresa. O eso parecía.

Por esta razón, ha habido un detalle de la promoción de La sirenita que llama la atención. Y es que uno de sus personajes más recordados, uno que juega un papel decisivo en la trama, ha estado completamente ausente.

Hablo de Vanessa, el alter-ego que utiliza Úrsula en la superficie para conquistar al príncipe Eric y destrozar los sueños Ariel. Era un rol audaz, sensual y muy femenino que se comía la pantalla con un carisma arrebatador, por lo que verle representado en acción real podía ser una de las mejores virtudes de este remake. Pero como digo, ni rastro de él en la campaña promocional.

La opción de no mostrarla para evitar spoilers se desmonta por todo lo que vengo comentando. Todos conocemos la historia de La Sirenita, sabemos quien es el personaje y, teniendo en cuenta que prácticamente todos los momentos importantes de la película se colaron en la promoción, como mínimo deberíamos haberlo visto, aunque sea muy de pasada, en algún tráiler, póster o imagen.

También cabía la opción de que se hubiera eliminado a Vanessa de la trama y Úrsula tejiera un plan diferente contra Ariel. Pero era un sinsentido, porque si el remake apostaba tan fuerte por la nostalgia sería absurdo borrar a uno de los personajes más arrebatadores al que muchos guardan especial cariño. O si no, recordemos lo que pasó cuando en remakes como Mulán obviaron a personajes tan queridos por el público como el dragón Mushu, que al ser sustituido por un fénix desató una ola de opinión negativa. Incluso antes del estreno de la película.

Además, hubiera sido un cambio de última hora, porque Disney ya había anunciado el fichaje de la actriz y modelo Jessica Alexander, para interpretar el papel. La joven británica de 23 años no aparecerá en las imágenes promocionales, clips o videos de la película, pero se dejó ver en diferentes alfombras rojas previas al estreno y concedió varias entrevistas hablando de su trabajo.

“Es un sueño de mi infancia. Siempre quise hacer esto. Y tuve la suerte de terminar haciéndolo, lo cual es un privilegio. Ya quería ser actriz cuando tenía 5 o 6 años. Siempre he tenido este sueño en mente y ahora lo he realizado. La primera vez que vi La Sirenita tenía 4 o 5 años y me obsesioné con la película”, contaba para el diario francés Nylon.

“Aunque no sé si me reconozco mucho en Vanessa. Es hermosa, pero es un poco insolente”, explica sobre su papel, que cree que se ha vuelto “menos unidimensional que en la película original”. “Al principio la interpreto de forma suave y acogedora, hasta que se rompe y luego soy como un demonio desatado. Es mucho más interesante y con una película en acción real percibimos mejor la humanidad del personaje”, matiza.

Definitivamente, Vanessa iba a estar en el remake de La Sirenita. Entonces, ¿por qué tanto empeño en ocultarla? ¿Hay algo del personaje que molestara a Disney? ¿Tal vez era demasiado arrebatador y sensual para la imagen de película familiar que quieren vender? ¿Habrían introducido algún cambio fuerte que quisieran ocultar al público? No, nada de esto. Tiene que ver con una cuestión que beneficia al personaje y a la película más de lo que pudiéramos pensar.

Visto el remake he de decir que Vanessa tiene una presencia muy limitada. En la cinta de animación no es que tuviera mucho más protagonismo, pero al ser una producción de poco más de una hora su aparición estaba más compensada que en las casi dos horas y media que dura la readaptación. Y no es precisamente malo, sino todo lo contrario.

Al pasar tan rápido por pantalla, tener una belleza tan fuera de lugar y una mirada tan cautivadora, luce como una ilusión extraña y pasajera que se queda clavada en la mente. Ya no es tanto la maldad que desprende Vanessa, sino su carácter absorbente. Y es que se siente como un hechizo que te mantiene atado al personaje, que es justo la narrativa que trae este papel en su intento de engañar al príncipe e ir contra Ariel.

Puede sonar exagerado, pero les aseguro que cumple su función con creces. Y aquí ha tenido mucho que ver el carisma que derrocha Jessica Alexander y lo bien que se mimetiza con el personaje, su maldad y sus miradas de embrujo. Por ello, entiendo muy bien que hayan mantenido estas imágenes guardadas bajo llave. Y no solo por su brevedad y la dificultad de encajar algo tan hechizante en la promoción de un título musical familiar, sino por mantener su carácter hipnótico y misterio, que constituye una de las sorpresas de este remake en comparación con la cinta animada de 1989.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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