Elizabeth Hurley dio detalles de cómo fue trabajar con Matthew Perry en su peor época de adicciones: “Fue una pesadilla”

Elizabeth Hurley definió su experiencia en el set con Matthew Perry como "una pesadilla"
Elizabeth Hurley definió su experiencia en el set con Matthew Perry como "una pesadilla" - Créditos: @Featureflash Photo Agency

A principios de este mes, Matthew Perry publicó sus memorias Friends, Lovers and the Big Terrible Thing, donde habló de sus años más oscuros. Tras reconocer que estuvo al borde de la muerte por culpa de sus adicciones, el actor reveló quiénes lo ayudaron a atravesar esa difícil etapa de su vida y mencionó a sus compañeros de Friends, en especial a Jennifer Aniston, como sus “guias” en ese difícil momento. Sin embargo, no todos recuerdan estos años con compasión, y en las últimas horas, la actriz Elizabeth Hurley contó cómo fue su experiencia laboral al lado de Perry.

La intérprete de Austin Powers coincidió con el actor en el set de Infielmente casada, una comedia romántica de 2002. Y si bien con el tiempo lograron mantener una buena relación, Hurley reveló que al principio no se llevaban nada bien. “ Para ser honesta, fue una pesadilla trabajar con él en ese momento, y como ahora se sabe, nuestra película fue cancelada debido a su adicción ”, le dijo a Yahoo! Entertainment en una reciente entrevista.

Hurley y Perry protagonizaron Infielmente casada en el año 2002.
Hurley y Perry protagonizaron Infielmente casada en el año 2002.

Tras confesar que hubo varias escenas que tuvieron que desechar porque el galán “arrastraba la lengua”, la actriz confirmó que finalmente el rodaje tuvo que suspenderse para que Perry ingrese en rehabilitación. “Estábamos en una situación de fuerza mayor y tuvimos que irnos a casa durante un tiempo. Fue difícil”, confesó. Sin embargo, dos meses después, Matthew volvió al set totalmente renovado. “Cuando regresó de su periodo de dos meses de rehabilitación fue fabuloso. Obviamente, estaba pasando por un momento difícil pero aún así era muy agradable y una persona encantadora con la que trabajar. Se podía notar que estaba sufriendo” , recordó.

Por su parte, Perry también hizo referencia al rodaje de ese film en sus memorias y reconoció que tanto Hurley como el director Reginald Hudlin estaban muy enojados por la situación, no sólo por lo difícil que se tornó trabajar en el set día a día, sino porque la película fue un fracaso de taquilla. “Por supuesto que la película fracasó de todos modos”, dijo el actor a pesar del receso y de volver a filmar las escenas más complicadas.

La comedia romántica tuvo que parar dos meses las grabaciones debido a las adicciones de Perry.
La comedia romántica tuvo que parar dos meses las grabaciones debido a las adicciones de Perry.

Al parecer, para Matthew tampoco fue una grata experiencia: no sólo fue demandado por la producción, que lo responsabilizó por las pérdidas, sino que tuvo que pagar por ello. “ Me pagaron 3.5 millones de dólares por hacerla y al final me demandaron, a pesar de que padecía un problema de salud. Les hice un cheque por 650.000 dólares ”, recordó.

Sus adicciones y una agenda laboral cargada de compromisos contribuyeron al colapso del actor, que por aquel entonces brillaba en la sitcom más exitosa de los 90. “La película fue filmada en Dallas y yo estaba haciendo Friends al mismo tiempo, así que dupliqué mi carga de trabajo. Estaba volando en un jet privado y bebiendo vodka en una botella de agua”, confesó sobre aquellos años que asegura haber dejado en el pasado.

Viaje al infierno

Matthew Perry identifica sus comienzos en el mundo del alcohol a la edad de 24 años, exactamente cuando fue elegido para ser Chandler en Friends. “Podía manejarlo, más o menos. Pero cuando tenía 34 años estaba realmente atrapado en muchos problemas”, indicó dando cuenta de las consecuencias que este tipo de adicciones trae tanto a nivel físico como psicológico.

Matthew Perry publicó recientemente su autobiografía Friends, Lovers and the Big Terrible Thing
Matthew Perry publicó recientemente su autobiografía Friends, Lovers and the Big Terrible Thing - Créditos: @MICHELLE GROSKOPF

Mientras triunfaba en la pantalla, cuando las cámaras se apagaban su realidad era otra: en un momento tomaba 55 pastillas de Vicodin (un analgésico para dolores moderados a intensos) por día y bajó considerablemente de peso. “ No sabía cómo parar. Si la policía hubiese venido a mi casa para decirme ‘si bebes esta noche, te llevaremos a la cárcel’, hubiera comenzado a empacar. No podía parar porque la enfermedad y la adicción son progresivas. Así que empeora cada vez más a medida que envejeces ”, reconoció quien a lo largo de esos años entró alrededor de 15 veces en rehabilitación.

A pesar de que el galán de Hollywood quiso ocultar su condición, su apariencia lo delataba cada vez más. Tras aclarar que sus compañeros de elenco estaban al tanto de todo, Perry agradeció lo “comprensivos y pacientes” que fueron con él. “Es como ocurre con los pingüinos. Los pingüinos, en la naturaleza, cuando uno está enfermo, o cuando uno está muy herido, es rodeado por sus pares, que lo sostienen. Caminan alrededor de él hasta que ese pingüino puede caminar por sí solo. Eso es más o menos lo que el elenco hizo por mí”, expresó en referencia a la actitud que tomaron Jennifer Aniston, Courteney Cox, Lisa Kudrow, Matt LeBlanc, y David Schwimmer.

Hoy, el actor no sólo acepta que sus problemas de salud interfirieron en su trabajo sino que le pide disculpas a todos aquellos a los que, sin querer, afectó por culpa de sus excesos. “He tenido 14 cirugías en el estómago hasta ahora. Eso es un montón de recordatorios para mantenerse sobrio. Todo lo que tengo que hacer es mirar hacia abajo”, aseguró quién día a día lucha para no volver a caer en aquel infierno.