El método extraño por el que Hugh Jackman obtuvo su papel más oscuro

Enfundarse las garras de Lobezno abrió a Hugh Jackman las puertas del éxito. Tras destacar en teatro y protagonizar sus primeras películas en su Australia natal, el triunfo mundial de los mutantes de Marvel con X-Men le convirtió en toda una estrella que Hollywood no tardó en aprovechar. Solo hay que ver que en esos años accedió a cintas de prestigio como El gran truco de Christopher Nolan, La fuente de la vida de Darren Aronofsky o a Amor y muerte de Woody Allen, entre muchas otras.

Uno de las primeros que le llegó fue una oscura película de Universal Pictures, una ambiciosa historia de acción y terror que unió a monstruos clásicos como Drácula, Frankenstein o el Hombre Lobo con la intención de iniciar una nueva franquicia de éxito. Hablo de Van Helsing, el título que Jackman protagonizó junto a Kate Beckinsale interpretando a este mítico cazavampiros de la novela de Bram Stoker, una cinta que corrió a cargo del director Stephen Sommers (La momia) y que se convirtió en su primer gran blockbuster tras las dos primeras entregas de X-Men.

Lo lógico es pensar que el furor de su interpretación de Lobezno motivó su fichaje. La intensidad que desprendía en pantalla, su destreza en las escenas de acción y la admiración del público lo convertían en la estrella ideal para una película como Van Helsing, pero la realidad es que X-Men no tuvo nada que ver para que Jackman acabara entre las criaturas más terroríficas del cine. De hecho, el método por el que fue elegido fue completamente inusual para una cinta de terror de estas características, puesto que habilidades del actor como el canto o sus arrebatadoras miradas románticas, que poca relación tenían con películas de monstruos y acción, jugaron un papel esencial.

La anécdota está relacionada con una interpretación de Hugh Jackman en teatro, cuando a finales de los 90 sobresalió sobre los escenarios de Londres con el musical “Oklahoma!”. Esta obra, que tuvo su adaptación al cine en 1955, es una de las representaciones más míticas de la esfera teatral estadounidense, una historia romántica sobre vaqueros en la que un cowboy llamado Curly trata de demostrar a una joven que merece su amor. Toda ella está llena de canciones, coreografías y momentos románticos y cursis que nada tienen que ver con Van Helsing, pero cuando los responsables de la película buscaron a su protagonista encontraron detalles en la actuación teatral de Jackman que creyeron perfectos para el cazavampiros.

La importancia de Oklahoma! para su fichaje en 'Van Helsing'

Lo contaron el director Stephen Sommers y el productor Bob Ducsay en una entrevista con Inlander. "Siempre termino un guion y luego se lo doy a Bob para que tome mis notas. Y en la primera lectura, Bob suele decir quién va a protagonizarlo", dijo Sommers, que ya tenía experiencia adaptando a monstruos míticos tras llevar al éxito 'La momia' con Brendan Fraser. "Y dijo Hugh Jackman. No había visto la primera película de X-Men y la segunda aún no había salido. Sólo había visto a Kate y Leopold, así que realmente no lo conocía".

Bob Ducsay destacó que para el casting Van Helsing no priorizaron la capacidad de infundir terror o la habilidad con la acción, más bien encontrar a alguien con carisma, buena presencia física y capacidad de conectar con el público. Por ello, cuando leyó el guion de la película, recordó al instante el trabajo musical de Hugh Jackman en Oklahoma!, con el que ganó su atención cuando aún era un desconocido a ojos de Hollywood.

Puede parecer un método de casting extraño, pero, valorando que era un blockbuster destinado a llegar al gran público y a arrasar en taquilla, tiene sentido que priorizaran estas virtudes antes que otras como la oscuridad o temeridad de un actor. Además, el film tampoco estaba exento de romance, aunque este fuera un poco más siniestro.

"Fue en el Teatro Nacional de Londres, cuando interpretaba Curly en Oklahoma!", recordaba el productor de Van Helsing. "Hugh no habría estado sobre el escenario durante más de cinco minutos, pero yo ya pensaba: ‘¿quién es este tipo?’. Nunca lo había visto, nunca había oído hablar de él, y aun así causó una gran impresión”, continuaba. “El nivel de carisma, fuerza y fisicalidad que aportó a ese papel, en un musical precisamente, de alguna manera parecían aplicarse aquí. Era grande, guapo y carismático y todas esas cosas eran necesarias para el personaje de Van Helsing".

La película no funcionó. Fue destrozada por la crítica, en taquilla no hizo grandes números y los planes de realizar una franquicia de monstruos clásicos cayeron en saco roto. Sin embargo, las virtudes que el director y productor buscaron para su protagonista lucieron a la perfección bajo la piel de Jackman. Él destacó en pantalla con su Van Helsing con el mismo ímpetu que con otros personajes como Lobezno y, al final, quedó demostrado no fue nada descabellado recurrir a un musical romántico para realizar el casting de un film oscuro de acción.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine 54.

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