Irreconocible: así luce hoy Angus T. Jones, el adorable niño de la serie 'Two and a Half Men'
La serie de televisión Two and a Half Men fue un éxito en la década del 2000. El día a día de Charlie, Alan y Jake Harper atrapó a los espectadores al ser relatado a través de la ironía y un toque de humor ácido. La producción se mantuvo en la pantalla chica durante 12 años, protagonizada por Charlie Sheen y luego por Ashton Kutcher. Durante su emisión, la ternura del pequeño, a quien dio vida Angus T. Jones, eclipsó a los fans de la serie y, 8 años después de su último capítulo, se sorprendieron al ver cómo creció la estrella de la comedia.
Angus Turner Jones saltó a la fama por su papel en Two and a Half Men, donde interpretó a Jake Harper. Tenía tan solo 10 años cuando se estrenó la serie y 22 cuando finalizó, por lo que los espectadores pudieron ver el crecimiento del actor que daba sus primeros pasos hasta convertirse en un adulto.
Así, junto a Sheen y a Jon Cryer, tanto el elenco como los fanáticos observaron el paso a paso en su trayectoria. Hace unos meses, comenzaron a circular en las redes sociales una serie de fotos que lo muestran cómo está hoy, a los 29 años, y todos se sorprendieron por su cambio.
A Jones, quien en su momento se convirtió en el actor infantil mejor pagado de la televisión, no le agradó el cambio de su personaje, al que relacionaron con el consumo de drogas, y por eso decidió abandonar la serie antes de que llegara a su desenlace.
A partir de allí, se dedicó a causas benéficas, especialmente a aquellas enfocadas en ayudar a niños que sufren abusos, y se centró en su religión.
El actor comenzó a estudiar una carrera en Ciencias Medioambientales en la Universidad de Colorado, pero después se cambió a la de Teología y se especializó en el judaísmo.
En septiembre de 2022, en una entrevista con el diario La Vanguardia, contó que “se entregó a la fe y a Dios” tras sobrevivir a un accidente, y también hizo referencia personaje en la serie que lo llevó a la fama y fue tajante con su mensaje: “Te llena la cabeza de porquerías. No la vean. Dejen de verla”.