Los Oscar y la ironía de exprimir a ‘Barbie’ como mejor le conviene

La Academia recurre al fenómeno de 2023 para lanzar la campaña promocional de la ceremonia del 10 de marzo

Margot Robbie y Greta Gerwig se quedaron fuera de las nominaciones de los Oscar, pero ahora su película sirve para invitar a las masas a sintonizar la ceremonia. (Foto de Valerie Macon/AFP via Getty Images)
Margot Robbie y Greta Gerwig se quedaron fuera de las nominaciones de los Oscar, pero ahora su película sirve para invitar a las masas a sintonizar la ceremonia. (Foto de Valerie Macon/AFP via Getty Images)

Los Oscar comienzan a calentar motores para la ceremonia del próximo 10 de marzo. Ya celebraron el almuerzo que dedican a los nominados cada año, donde la créme de la créme se da cita para la foto grupal más codiciada de Hollywood, mientras la organización comienza a preparar el terreno para convocar al público ante el televisor. Sin embargo, viendo la primera publicidad, cualquiera diría que la Academia está queriendo exprimir a Barbie como mejor le conviene. A pesar de todo.

La primera promoción de la gala dura casi cinco minutos y es un homenaje directo a la película sobre la muñeca de Mattel, donde Jimmy Kimmel aparece perdido en Barbieland y pide ayuda a la ‘Barbie rara’ (Kate McKinnon) para regresar a Hollywood. Así comienza la misma travesía que realiza la Barbie de Margot Robbie en la historia, pasando por diferentes homenajes a películas nominadas -como si fueran los paisajes que transita la muñeca en su viaje- para entonces llegar a los Oscar. En ese momento, el maestro de ceremonias declara los nervios que siente ante el rol que le toca cumplir, pero entonces aparece America Ferrera emulando su papel de consejera inspiradora y Ryan Gosling repitiendo el ego inflado de Ken.

“Lo bueno es que Greta tiene el premio a Mejor Director en el bolsillo”, dice Gosling como si fuera tan iluso como Ken después de reconocer que no ganará el Oscar (las quinielas apuntan a Robert Downey Jr.). Sin embargo, cuando Ferrera le confiesa la gran debacle de los Oscar tras haber dejado a la cineasta fuera de las nominaciones, Gosling grita. Tal y como lo hace en la escena en que sorprende a Barbie apareciendo en el asiento trasero del auto.

Grita y grita sin parar mientras la voz narradora de Helen Mirren se burla de la masculinidad infantilizada imitando el mensaje de Barbie. “Las chicas crecen en mujeres pero no todos los niños se hacen hombres. Algunos se quedan sin esperanza estancados en un bucle de tontería infantil. Uno de ellos presentará los Oscar”, concluye.

El golpe irónico de los Oscar

Que la Academia optara por recurrir a Barbie para lanzar su campaña publicitaria puede tener dos lecturas. La primera es que reconocen el valor de la película como fenómeno del año, utilizándola como representante inicial de la ceremonia de los Oscar de cara al público. La segunda es un poco más crítica y dolorosa.

Se nota que el video es una autocrítica de la Academia. No solo homenajean al filme repitiendo su premisa, mensaje e iconografía visual, sino que incluyen la sonada debacle de haber dejado a Greta Gerwig fuera de las nominaciones cuando su trabajo y visión fue celebrado por la industria y público por igual con una recaudación de $1.445 millones en todo el mundo (Box Office Mojo).

Sin embargo, algo se siente extraño. No voy a negar que ganan un tanto a su favor al contar con el beneplácito de Ryan Gosling, America Ferrera y Kate McKinnon, pero que terminen recurriendo a Barbie como emblema publicitario para convocar a ver la ceremonia de los premios es una ironía difícil de digerir.

Para empezar, Barbie fue el blockbuster que menos nominaciones recibió este año (ocho), colocándose por detrás de Oppenheimer (13), Pobres criaturas (11) y Los asesinos de la luna (10), a pesar de haber sido el más taquillero de 2023 con una influencia bestial a la hora de infiltrarse en la cultura mundial. Pero, sobre todo, fue el protagonista de una debacle que dio la vuelta al mundo y colocó a todo Hollywood en una tesitura complicada.

Que los miembros de la Academia votaran y dejaran fuera a Greta Gerwig y Margot Robbie de las nominaciones a Mejor Director y Actriz, pero sí incluyeran a Ryan Gosling (actor secundario), se percibió como el desacierto más equivocado del mundo el cine. Que una película que habla de feminismo y el horror social del machismo termine recibiendo un reconocimiento para el rol masculino por encima de las mujeres que llevaron la batuta fue, en pocas palabras, un golpe que nadie se esperaba.

Por este motivo, que la Academia ahora recurra a Barbie como baza comercial para invitar a ver su ceremonia se puede percibir como una ironía injusta: sus miembros no supieron valorarla lo suficiente a la hora de votar sus logros pero, cuando se trata de inflar el interés comercial de la gala, sí les sirve recurrir a ella como anzuelo. Casualmente cuando siguen luchando por recuperar a la audiencia de antaño.

No olvidemos que la ceremonia lleva varios años sufriendo el desinterés del público masivo, siendo una espina que la Academia intentó quitarse de encima probando diferentes tácticas, como recortar la gala quitando candidaturas de la emisión en directo (lo que derivó en un tsunami de críticas) o eliminando la figura del maestro de ceremonias.

Si ponemos cifras sobre la mesa, hace 10 años que la gala no convoca a más de 40 millones de televidentes (el año de la victoria de 12 años esclavo que presentó Ellen DeGeneres con el famoso selfie que se convirtió el tuit más retuitado de la historia). Previamente disfrutaba de un rating popular que se movía entre los 31.76 millones (2008) y 46.33 millones (2000). No obstante, desde 2014 fue bajando hasta una estadística estrepitosa de 10.4 millones (2021). Desde entonces fue subiendo, pero muy poco cuando lo comparamos con el nivel de convocatoria de antaño (Fuente: Statista).

En 2022 obtuvieron un rating en Estados Unidos de 16.62 millones y 18.7 millones el año siguiente. En consecuencia, que logren convocar a más televidentes supondría la revalorización de los Oscar como evento cultural y mundial, además de conseguir el aumento progresivo del coste del minuto publicitario.

Me parece perfecto que se rían del error y el mensaje paralelamente opuesto que terminaron enviando con sus nominaciones, pero no deja de ser irónico que ahora expriman su potencial como imán de masas internacional, jugando con la parte más divertida del filme, sus personajes y el atractivo popular de Ryan Gosling para incitar al público a no perderse la gala. La misma gala donde Greta y Margot están nominadas.

Parece que la Academia quiere hacer borrón y cuenta nueva. Patear la piedra en el camino que simbolizaron las no-nominaciones de Barbie y pasar página de cara a la ceremonia del 10 de marzo. Sin embargo, entre la percepción generalizada y la rumorología que apunta a Oppenheimer como la gran ganadora de la noche (sus victorias en la temporada de premios así lo indican), y el desprecio inicial a Greta y Margot, resulta inevitable sentir que el comercial de los Oscar exprime a Barbie porque le conviene.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VIDEO

'La sociedad de la nieve' arrasa en unos Goya que reconocen, a la tercera, a Maite Alberdi

Keanu Reeves cada vez más cerca de su sueño en los Oscar

Cuando un pulpo ganó el Oscar, el inusual protagonista de un documental de Netflix

Bradley Cooper repite la "vergüenza" que sintió por culpa de los Oscar, aunque no tiene nada de qué avergonzarse