¿Qué le pasó al ojo de Katy Perry en Las Vegas? No es lo que muchos especulan
Que si es un androide, que si es una computadora a la que no le están corriendo las actualizaciones, que si es un alien que está fallando en la Tierra… Son muchas las teorías, una más alocada que la otra, ante lo que le ha ocurrido con el ojo de Katty Perry durante un concierto en Las Vegas hace un par de días.
Mientras terminaba un número, el ojo se le cerró como si de una muñeca antigua se tratara, ella impávida, sube su mano delicada y se lo abre de nuevo. Sin duda parece una escena de Stepford Wives (2004), pero no. Lo que le ha ocurrido a Katy Perry sorprende, pero tiene una explicación.
La doctora Vanessa Fuentes, médico oftalmólogo, investigadora y coach visual digital alerta sobre la gran desinformación que se evidencia con la afluencia de notas publicadas y contenidos en redes sociales sobre lo sucedido a la cantante, donde se ha especulado acerca de una condición que ella reveló sufrir hace algún tiempo.
"En muchos medios se ha dicho que el ojo cerrado de Katy Perry en el concierto de Las Vegas, es producto de la ambliopía, pues ella manifestó sufrir de esta condición en algún programa de televisión, pero es necesario aclarar que lo que se ve en las imágenes no es esto", dice la especialista quien especifica que la ambliopía también es conocida como ojo perezoso, que no se ha desarrollado bien en la infancia y no llega a 20/20, con lo cual el paciente ve mejor por un ojo que por otro.
Es posible que la ambliopía haga que el ojo donde se padece se desvíe un poco hacia afuera o hacia adentro, pero lo que se ve en el video del concierto del 22 de octubre es otra cosa, que puede resultar alarmante y llamativa, pero en realidad no se trata de una condición grave.
“Podemos ver en el video cómo la cantante tiene un problema en el párpado, una contracción involuntaria. Clínicamente eso se llama blefaroespasmo esencial benigno en el ojo derecho. Esto es una distonía facial, este sería el término médico, y hay varios tipos. La más común es el tic nervioso en el ojo que todos hemos tenido en algún momento, que no se nota. En este caso el ojo se cerró por completo de manera involuntaria”.
La experta señala que este blefaroespasmo esencial benigno no requiere ningún tratamiento específico ni tampoco significa que en algún momento se le va a cerrar de manera indefinida. Esto desaparece de manera espontánea.
“También podría ser un problema neurológico, pero también puede ser algo simple como que le faltaba lubricación en el ojo en ese momento que se pudo haber acentuado con la cantidad de maquillaje que tenía y las pestañas postizas. Pero yo creo que la causa fundamental, en este caso, puede ser estrés extremo, cansancio, que es frecuente en estos casos”.
La médico señala que este diagnóstico, blefaroespasmo esencial benigno, no es nada grave, no tiene nada que ver con la ambliopía, porque no ver bien por un ojo no causa que se caiga de esa manera el párpado y requiere descanso, además de rutinas para liberar el estrés y evitar preocupaciones.
Con esto queda claro que las teorías tanto preocupantes como hilarantes que se han compartido no son ciertas. Perry no es un robot, ni un alien, simplemente es una celebridad que como tantas se estresan con su trabajo que las expone ante millones de personas en el mundo.