Supuesto abuso a una mujer por Sean 'Diddy' Combs utilizando un control remoto se detallará en un nuevo documental
La supuesta violación de una mujer por Sean 'Diddy' Combs utilizando un control remoto se detallará gráficamente en un próximo documental sobre el rapero.
El fundador de Bad Boy Records, de 55 años, languidece en la cárcel de Nueva York por cargos federales que incluyen chantaje y tráfico sexual, y la mujer que responde al nombre de Ashley relatará el aparente ataque en la película de Peacock 'Diddy: The Making of a Bad Boy'.
Según la revista PEOPLE, el rostro del rapero no aparecerá en el documental.
La mujer demandó a Combs en el pasado mes de octubre ante el Tribunal de Distrito de Estados Unidos en el norte de California, donde los documentos la identifican como Ashley Parham.
Su demanda se produjo semanas después de que Combs fuera detenido y acusado de asociación ilícita, tráfico sexual y transporte para ejercer la prostitución, y encarcelado en el Centro de Detención Metropolitano de Brooklyn, donde está a la espera de juicio.
La mujer asegura que el supuesto ataque ocurrió tras conocer al rapero en 2018 después de que él se presentara inesperadamente en el apartamento de su amiga en California con un séquito que incluía a su asistente Kristina Khorram.
Ashley dijo anteriormente que estaba convencida de que él tenía "algo que ver" con el asesinato del rapero Tupac Shakur en 1996, y que Combs escuchó su comentario y juró hacerle "pagar".
E indica que entonces la invitó a su apartamento, donde supuestamente le puso un cuchillo en la cara y la amenazó con cortarla.
Ashley añade que Combs y uno de sus empleados la desnudaron y la cubrieron de aceite antes de que el rapero supuestamente le practicara un acto sexual con el control remoto de un televisor.
La demanda dice: "Diddy, mientras violaba violentamente a Ashley con un control remoto de televisión, le dijo a la demandante que su vida estaba en sus manos y que si quería podía 'llevársela' y que nunca nadie la volvería a ver".
Combs también es acusado de ordenar a uno de sus trabajadores que violara a Ashley después de que supuestamente la atacara.
El rapero niega todas las acusaciones de conducta sexual inapropiada que pesan sobre él y su equipo legal ha tachado las acusaciones de Ashley de "inventadas" en una declaración a los responsables del documental.