Las bromas provocadoras de los premios de Hollywood se cobran otra víctima innecesaria

Las entregas de premios no suelen ser lo mismo sin un toque de humor. Después de todo, mantener al público delante del televisor y a los asistentes entretenidos para los buenos planos de cámara requieren de diferentes tácticas que no despierten el aburrimiento. Reírse de la propia industria es una herramienta habitual que aplican los cómicos contratados para servir de presentadores y amenizar la velada. Después de todo, reírse del privilegio hollywoodense o tomar a las estrellas más famosas de punto tiene su gracia. Sin embargo, en las últimas semanas hemos sido testigos de bromas que buscan ofender sin venir a cuento. Bromas que parecen buscar la provocación para el momento viral de turno, que realmente provocar una mínima risa.

Porque después de los momentos sin gracia que vivieron Selena Gomez y Taylor Swift en los Golden Globes, ahora le tocó a Ariana DeBose pasar por lo mismo en los Critics Choice Awards con un chiste que no solo no era gracioso, sino que no tiene ningún fundamento, pero era lo suficientemente ofensivo como para provocar la reacción molesta ante el lente atento de la cámara. Esos planos y reacciones que se convierten en memes instantáneos de redes sociales.

La actriz de ascendencia puertorriqueña por parte de padre, que ganó el Óscar como Mejor Actriz Secundaria en 2022 por su trabajo en Amor sin barreras, se encontraba entre los nominados de este año de los premios que entrega la Asociación de la Elección de la Crítica Cinematográfica (Critics Choice Association), en la categoría de Mejor canción por interpretar el tema de la película de Disney, Wish. Anthony Ramos (En el barrio) y Bella Ramsey (The last of us) eran los encargados de nombrar al ganador cuando una broma sin sentido apuntó hacia Ariana con un chiste que bien podía ser entendido como un insulto.

Ramsey presentó la categoría destacando que los nominados eran “algunas de las voces más famosas de la industria de la música”. Ramos destacó los nombres de Billie Eilish, Lenny Kravitz y Dua Lipa, pero entonces Ramsey se refirió a los restantes -Ariana DeBose, Jack Black y Ryan Gosling- Como “actores que piensan que son cantantes”. Y la reacción de Ariana no tuvo precio.

La canción ganadora fue I’m just Ken de Barbie, esa que se hizo viral a través de la actuación de Ryan Gosling, siendo uno de los seis galardones que se llevó la película de Greta Gerwig, incluyendo Mejor guion original. Aunque la gran ganadora de la noche de los Critics Choice Awards fue Oppenheimer, repitiendo la hazaña de los Golden Globes y continuando su camino firme hacia los Óscar, llevándose un total de ocho reconocimientos, incluyendo Mejor película y Mejor director.

Sin embargo, el momento de Ariana DeBose llamó la atención porque no pudo esconder su sorpresa ante la broma sin sentido, reaccionando ante las cámaras estupefacta para entonces responder en Instagram a través de una historia donde declaraba su postura: “No, no me pareció gracioso. LOL”.

Digo sin sentido porque Ariana DeBose no será una cantante con álbumes en el mercado, pero es dueña de una trayectoria musical que la llevó a ganar el Óscar. A sus 32 años cuenta con un currículo que incluye varios musicales de Broadway, desde Bring it on a Motown: The Musical (donde fue la suplente del papel de Diana Ross), Pippin, la exitosa obra de Hamilton y Summer: The Donna Summer Musical. Fue ascendiendo a pasos agigantados desde 2012, siendo nominada al premio más importante de teatro, los Tony, en 2018.

A su vez también tuvo un personaje en la serie musical de Apple TV+, Schmigadoon!, y cautivó al mundo en el papel de Anita en el remake de Amor sin barreras dirigido por Steven Spielberg. Un trabajo que no solo le valió el aplauso de la crítica, el Golden Globe, BAFTA y otros galardones, sino también el Óscar.

Es probable que la broma de los Critics Choice se apoyara en que no tiene un disco de estudio como otros cantantes nominados o, tal vez, en las criticas que recibió Ariana DeBose cuando cantó un rap en los BAFTA de 2023. Sin embargo, son motivos sin peso cuando se valora la trayectoria que acumula esta actriz a lo largo de los últimos años con unas dotes vocales que el cine, el teatro y la televisión han aprovechado con éxito.

Una moda hollywoodense que toca cuestionar

El caso de Ariana DeBose se suma a lo que ocurrió una semana atrás en los Golden Globes cuando el presentador, Jo Koy, lanzó un par de bromas rancias que causaron el disgusto en personajes como Selena Gomez y Helen Mirren.

El monólogo y bromas de Jo Koy no causaron gracia en líneas generales. Digamos que los silencios tras muchos chistes lo dejaron en evidencia. Sin embargo, uno de los momentos que más repelús provocaron fueron los dedicados a Barbie por las connotaciones misóginas que, aunque fueran creadas a propósito recurriendo a la ironía, ya ni siquiera causan gracia.

“Oppenheimer está basada en un libro de 721 páginas ganador del Pulitzer sobre el Proyecto Manhattan, y Barbie es sobre una muñeca de plástico con pechos grandes”, dijo. “El momento central de Barbie es cuando pasa de la belleza perfecta al mal aliento, celulitis y pies planos. O lo que los directores de casting llaman un actor de personajes”, añadió y la reacción de Selena Gomez, Helen Mirren, Emma Stone y Ayo Edebiri lo dijeron todo ante el mensaje rancio del chiste cuando la película defiende, justamente, todo lo contrario.

Para empeorar las cosas, Koy se defendió de las críticas culpando a los escritores y la falta de tiempo para preparar las bromas. “Me dieron el trabajo hace 10 días, ¿quieren un monologo perfecto?”, decía a los invitados tras ver que sus chistes no causaban gracia. “Cállense. Están bromeando, ¿verdad? Escribí algunos de estos y son de los que se están riendo”. Poco después se disculpó con los escritores por haberlos señalado (Los Angeles Times).

Otro momento lo vivió Taylor Swift, quien se encontraba entre los invitados porque la película de su concierto, The Eras Tour, estaba nominada a Mejor Logro de Taquilla. La cámara no desperdició momentos para centrarse en ella al ser una de las figuras mediáticas más destacadas de la actualidad, capaz de provocar olas de reacciones en redes sociales y atraer el interés público con cada paso que da. Jo Koy aprovechó justamente su presencia para bromear sobre las apariciones populares que hace la cantante en cada partido de su novio en la NFL, Travis Kelce. “¿La gran diferencia entre los Golden Globes y la NFL? En los Golden Globes tenemos menos planos de Taylor Swift”, dijo y la cantante reaccionó sin inmutarse, como evitando dar la provocación que tal vez se esperaba.

Fue una broma de corte habitual en los premios de Hollywood donde se toma a una figura popular como punto. Lo vivió Meryl Streep, Leonardo DiCaprio y muchos más a lo largo de las ceremonias más recientes. No obstante, en este caso, cuando ponemos todo el asunto en contexto, sumando a Barbie y ahora Ariana DeBose a la ecuación, terminamos encontrando una tendencia a la broma irónica que aparentemente busca ofender y provocar una reacción con la cámara apuntando fijamente a cada estrella de turno.

Lo que me lleva a sospechar si estamos ante una tendencia centrada en la provocación para colarse entre la inmediatez informativa de las redes sociales, generando conversación y, por ende, audiencia e interés mediático dejando a los premios y premiados en segundo plano. Es cierto que el humor ofensivo no es nuevo en los premios de Hollywood. Ricky Gervais y Chris Rock lo dejaron claro en cada ceremonia que presentaron. Sin embargo, con esta tendencia surgiendo en dos ceremonias consecutivas a través de bromas que no causan gracia, que encima ofenden y tampoco tenían un trasfondo que tuviera sentido, se despierta la duda sobre la importancia que está dando la industria a la viralidad mundana por encima del propósito cinematográfico convirtiendo a sus nominados en títeres de turno.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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