El secreto que convirtió a una película de Jim Carrey en un clásico romántico

A mediados de los 2000, Jim Carrey conquistó y rompió nuestros corazones gracias a Eterno resplandor de una mente sin recuerdos, el drama que coprotagonizó con Kate Winslet sobre el borrado de recuerdos de una tormentosa relación. Con un enfoque ciertamente surrealista, el director Michel Gondry, también conocido por otros clásicos románticos de la década como La ciencia del sueño, sacó lo mejor de ambos intérpretes en una propuesta que nos dejó tan rotos como emocionados, una cinta para el recuerdo de cualquier cinéfilo y, especialmente, para aquellos que alguna vez hayan vivido una ruptura. Sin embargo, aunque este trabajo pasara a la historia, es una cinta de la que el cineasta no quiere volver a saber nada.

Gondry se encuentra en plena promoción de su última película, un drama con aroma autobiográfico titulado El libro de las soluciones que planta la oportunidad perfecta para charlar sobre su carrera y el papel de Eterno resplandor de una mente sin recuerdos. En una entrevista con Express, reconoce que es el título por el que la gente más le pregunta, pero no oculta que le produce molestia ser recordado por una producción que ahora mismo solo le despierta malos recuerdos.

"Estoy un poco cansado, para ser honesto", afirmaba el director sobre la cinta de esta pareja que continuamente borraba los recuerdos del otro, de la que reconoce que tomó detalles de su propia vida. “Tuve rupturas que se parecían mucho a esa. En realidad, tuve una ruptura cuando estaba editando la película. Así que estaba en un estado mental muy precario en ese momento”.

No quiso entrar en muchos detalles, pero sí admitió que una de las escenas más icónicas de Eterno resplandor de una mente sin recuerdos, aquella que involucraba al personaje de Jim Carrey preparándose para borrar de su mente a Clementine mientras empaquetaba sus pertenencias, le sucedió de forma casi similar en la realidad poco después de rodarla.

Lo curioso es que cuando realizó dicho momento creyó que estaba cayendo en clichés de las historias de pareja, que no iba a ser creíble, pero fue vivirlo en sus carnes y adquirir otro significado.

"Descubrí que algunas de las escenas eran un poco cliché, como cuando mete todas las cosas en la bolsa de plástico... y luego me pasó a mí. Eran cajas de cartón, pero era lo mismo", continuaba Gondry, que también detalló que otros instantes míticos del film, como cuando vemos a Carrey y Winslet asistir a un desfile de elefantes, surgieron de situaciones reales con su expareja que le hicieron reflexionar sobre el devenir de la vida y el amor. "Mi novia en ese momento me habló sobre el desfile. Ella lo leyó en el periódico", matizaba el cineasta para detallar la razón por las que le cuesta volver a este título. "Puedo decirte: cuando ves un elefante caminando, tienes que correr para alcanzarlo".

Pero más allá del pesar del director, estas palabras también ejemplifican por qué Eterno resplandor de una mente sin recuerdos se convirtió en uno de los títulos de culto más admirados de los 2000. Y es que leyendo el sentimiento de Gondry haciendo la película, durante ese proceso de ver cómo los clichés románticos cobran vida y rompen los prejuicios hacia el género, es fácil percatarse de que tuvo todo a su favor para aportar un sentimiento completamente diferente al de cualquier otro drama de pareja.

Aunque su ruptura ocurriera en pleno proceso de edición, con la película ya escrita y rodada, al ser una experiencia atípica que juega con el montaje para introducirnos la mente de sus protagonistas, fue el momento perfecto para dejar que sus emociones la elevaran por encima de su idea inicial, más allá de los tópicos que hemos visto una y otra vez en el género.

Al final, no se puede negar que situaciones que podemos considerar clichés pueden esconder tristes realidades, y dando con la tecla, como le ocurrió a Gondry, pueden ser perfectas para conectar con la realidad que asola a muchas personas y, en definitiva, tejer una experiencia insólita que enganche a un público masivo. Si a eso le sumamos el resto de elementos que rodearon a su producción, como contar con dos estrellas de la década como Jim Carrey y Kate Winslet, era difícil que Eterno resplandor de una mente sin recuerdos no fuera una experiencia imborrable de nuestra memoria.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine54.

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