Muchas personas con síntomas de asma no la padecen, y más datos sorprendentes sobre esta afección

Texto: Irina Kenigsberg

Los síntomas de asma no serían suficientes para diagnosticar la condición, dicen los expertos. ¿Te sorprende? Conoce otros datos del asma que quizás tampoco conocías.

Por ser una condición tan común, es importante conocer a fondo el asma. – Foto: Eric Audras/Getty Images
Por ser una condición tan común, es importante conocer a fondo el asma. – Foto: Eric Audras/Getty Images

– Muchos en realidad no la padecen

Hay personas que creen que tienen asma cuando en realidad no es así, encontró un estudio publicado en la revista científica JAMA en enero de este año. De los 613 sujetos estudiados en la investigación, que habían sido diagnosticados como asmáticos recientemente, alrededor de un tercio no sufrían en realidad esa condición.

Al parecer, muchos de ellos habían sido diagnosticados basándose solamente en sus síntomas, lo cual, en realidad, no debería servir como única evidencia. “Si te falta el aire, respiras con dificultad o toses, deberías sugerir que el médico pida una prueba de espirometría”, es decir, un test físico de la capacidad respiratoria, indica el autor principal y profesor de medicina, Shawn D. Aaron, al diario The New York Times. “Es una prueba rápida sin riesgos ni efectos secundarios, que puede predecir el asma u otras condiciones respiratorias”, añade.

– Pero también puede no detectarse

El asma, muchas veces no se diagnosticaría y no se trataría, creando una carga para los individuos y familias y, posiblemente, restringiendo sus actividades de por vida, se indica desde la Organización Mundial de la Salud (WHO, por sus siglas en inglés).

– Las emociones fuertes podrían desencadenar episodios

¿Crees que solo los alérgenos provocan episodios de asma? ¡Error! Sentir y experimentar emociones fuertes puede funcionar como desencadenante. Desde la Fundación Americana de Asma y Alergias (AAFA, por sus siglas en inglés) se incluyen entre ellas, el enojo, miedo, entusiasmo, risa, gritos y llanto, como posibles factores. Cuando los experimentamos, cambiaría nuestra respiración, inclusive si no sufrimos de asma. Aquellos que sí padecen esa afección, pueden llegar a experimentar también otros síntomas, como la sibilancia.

También habría otros generadores de síntomas, como los cambios hormonales durante el ciclo menstrual y problemas médicos como el reflujo ácido.

Los síntomas pueden aparecer por primera vez en la adultez

Si bien muchas personas desarrollarían el asma durante la infancia, los síntomas pueden aparecer en cualquier momento de la vida, se explica en el sitio Asthma and Allergies (perteneciente a la AAFA). Y a diferencia de los niños, que muchas veces los tienen de forma intermitente en respuesta a alérgenos o a infecciones respiratorias, los de los adultos recién diagnosticados serían más persistentes.

Ante cualquier duda, consulta a un médico de confianza.

Y tú, ¿sufres de asma o conoces a alguien que padezca esa condición?

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