La película de Bob Marley evidencia el problema que 'Bohemian Rhapsody' dejó en Hollywood

Kingsley Ben-Adir protagoniza este nuevo biopic musical que sigue la estela de la película sobre Freddie Mercury y Queen

'Bob Marley: La leyenda' sigue la estela creada por la película sobre Queen protagonizada por Rami Malek (Foto: Chiabella James/Paramount Pictures)
'Bob Marley: La leyenda' sigue la estela creada por la película sobre Queen protagonizada por Rami Malek (Foto: Chiabella James/Paramount Pictures)

Hollywood sigue apostando por los biopics musicales, y este 2024 le ha llegado el turno a Bob Marley. Kingsley Ben-Adir, acompañado por un reparto conformado por Lashana Lynch, James Norton, Anthony Welsh o Michel Gandolfini, da vida al icono jamaicano del reggae en una cinta titulada Bob Marley: La leyenda que explora varios pasajes de su vida, indaga en su legado, nos hace disfrutar de su música en la gran pantalla y se apoya en la misma fórmula que llevó al éxito a Bohemian Rhapsody: La historia de Freddie Mercury en 2019.

Solo hay que ver que, pese a que sus expectativas en taquilla eran moderadas, ha logrado erigirse como uno de los primeros éxitos cinematográficos del año. Desde su estreno el miércoles 14 de febrero, ha recaudado más de 51 millones de dólares en las salas estadounidenses y un total de 80 millones en todo el mundo, lo que ya supera su presupuesto de 70 y apunta a un buen recorrido comercial en próximas semanas.

Y es que, ¿a quién no le apetece vibrar con temas míticos como Three Little Birds o No Woman, No Cry e indagar en una vida llena de claroscuros con final trágico? Con el precedente del film de Queen, que se apoyaba exactamente en lo mismo, era raro que algo así no funcionara, sin embargo, al igual que aquella, estamos ante un producto tan centrado en agradar al público y en elevar la figura de su protagonista que se olvida de todo aquello que debería ser esencial en un biopic.

La fórmula de 'Bohemian Rhapsody' explotada en exceso

Siendo sincero, nunca fui gran fan de Bohemian Rhapsody. Fue una cinta que disfruté gracias al legado musical de Queen, pero, en el fondo, no dejaba de ser una sucesión de datos biográficos entre canción y canción que no profundizaban en nada, que se maquillaban en exceso y que se limitaban a adular a Mercury y al grupo. Se echaba en falta calado dramático, entrar con más jugo en cada tema, abordar pasajes controvertidos de la vida del cantante y saber aprovechar mejor su vertiente musical. Es decir, que no se estancara tanto a ser un producto comercial y conformista.

Con la película de Bob Marley, me ha vuelto a pasar lo mismo. Siento que todo el esfuerzo está en admirar su figura y en no caer en ningún detalle controvertido que pueda despertar aversión en el entorno del cantante o en sus fans. A nivel comercial es una opción perfecta, como bien ha demostrado su taquilla o la sobresaliente puntuación “A” en la encuesta a a pie de sala de Cinemascore, sin embargo, hace que el resultado de la película languidezca, porque lo que queda es un producto excesivamente blanco y sin garra para abordar nada.

Por ello, al copiar de forma tan vaga esta fórmula, creo que no hace más que reincidir en este mal legado de Bohemian Rhapsody y crear un nuevo precedente que no hará ningún bien a la industria ni al biopic musical. Esta vez, la fama de Marley les ha salvado los muebles, pero ya hemos visto casos donde el buen nombre de un cantante o su música no ha bastado por sí solo para funcionar en taquilla. Por ejemplo, en 2022, la película Quiero Bailar Con Alguien: La Historia De Whitney Houston, que también siguió los pasos del film protagonizado por Rami Malek, cerró su carrera comercial con apenas 59,8 millones de dólares, críticas nefastas y sin calado popular alguno.

Creo que Hollywood tendría que mirar al equilibro entre lo comercial y la profundidad dramática que les saque de la zona de confort. Fue lo que lograron películas como Rocketman, el biopic sobre Elton John con Taron Egerton que no dudó en abordar la controvertida relación del cantante con las drogas y en invertir en integrar las canciones a modo narrativo, como un musical al uso. Es cierto que su recaudación global de 195,3 millones de dólares no fue para tirar cohetes y no caló tanto entre el público, pero ante su coste reducido de 40 millones fue suficiente para obtener un producto rentable y dejar una cinta que se consolidará como un clásico.

Fotograma de 'Bob Marley: La leyenda', protagonizada por Kingsley Ben-Adir (Foto: Chiabella James/Paramount Pictures)
Fotograma de 'Bob Marley: La leyenda', protagonizada por Kingsley Ben-Adir (Foto: Chiabella James/Paramount Pictures)

No obstante, no dejamos de estar ante un negocio, y si saben que algo como Bohemian Rhapsody o Bob Marley: La leyenda les va a funcionar bien sin complicarse la vida, raro sería que quisieran dejarlo de lado. Por suerte, al menos nos dejan productos disfrutables por su vertiente musical o por la admiración que muchos profesamos hacia sus figuras protagonistas, sin embargo, a pesar de su éxito, no es difícil pensar que se quedan en tierra de nadie y que son oportunidades perdidas para hacer algo más grande con artistas de historias tan apasionantes.

Este artículo fue escrito en exclusiva para Yahoo en Español por Cine 54.

TAMBIÉN TE PUEDE INTERESAR | EN VÍDEO

Kingsley Ben-Adir cuenta cómo fue darle vida en el cine al legendario Bob Marley

La película oculta en 'Madame Web' que no se atrevieron a mostrarnos

Halle Bailey hace sombra al descalabro de 'La sirenita' salvando una película

El reto imposible de 'Argylle', el primer gran fracaso del año